La Serranía de Cuenca se prepara para la llegada del frío y la nieve
La Serranía de Cuenca se prepara para los cambios de temperatura previstos para la próxima semana.
En la localidad de Uña no puede faltar la leña de pino o de carrasca. El humo de las estufas también se convierten en protagonistas del paisaje.
Es una época del año que resulta muy atractiva para el turismo cuando caen los primeros copos. Y aunque a no todos les guste el frío, reconocen que merece la pena visitar el Parque Natural de la Serranía de Cuenca.
Cuenca actúa contra la nieve
La Comisión Técnica de Seguimiento del Plan de Emergencia Municipal de Vialidad Invernal (Pemuvi) en Cuenca ha mantenido una reunión para actualizar el protocolo de actuación y coordinar los medios humanos y materiales disponibles ante el inicio de la campaña invernal.
Como tal, hay disponibles más de un centenar de efectivos, una cuarentena de vehículos y en torno a 180.000 kilogramos de sal, apuntando que los silos de las pedanías ya están cubiertos de sal.
Todos estos medios están listos para ser activados en el caso de que la Agencia Estatal de Meteorología establezca previsión de nevadas y así lo determine este órgano. En este sentido, Aemet ya lanza este sábado la posibilidad de las mismas la semana que viene en la ciudad, ha informado el Consistorio conquense.
Una masa de aire muy frío de origen polar entrará este lunes a la Península dejando nieve y un "descenso brusco" de las temperaturas, según la actualización del pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para la próxima semana.
Este cambio de tiempo se debe a la entrada de una DANA por el norte peninsular que evolucionará durante los días siguientes a una borrasca fría, aislada de la circulación general.
Las mayores acumulaciones se esperan en el sistema Ibérico, especialmente en las zonas del este de Castilla-La Mancha, Teruel, Soria y La Rioja, así como en la cordillera Cantábrica, sistema Central y en Pirineos centrales, donde las mayores intensidades de desplazarán hacia el este de la zona.
A partir del jueves, aunque aumenta bastante la incertidumbre, es probable que la borrasca se aleje hacia el este y que sea reemplazada por otra procedente también del norte, de forma que se mantendrá el tiempo invernal al menos hasta el final de la semana.