SECTOR AGROALIMENTARIO
Agricultores y ganaderos europeos miran con recelo hacia América, del Norte y del Sur
El presidente estadounidense, Donald Trump, confirma que subirá los aranceles a las importaciones de Europa. En el sector preocupa también el acuerdo con Mercosur.
El recién regresado a la Casa Blanca, Donald Trump, asegura que la balanza comercial con Europa es deficitaria para los Estados Unidos y que, por eso, y porque se sienten maltratados por la política comercial comunitaria, habrá aranceles para todos.
El presidente estadounidense confirma, de este modo, finalmente que sí subirá los aranceles para las importaciones que lleguen de Europa.
En una rueda de prensa ante los medios de comunicación, ha asegurado que es la única medida para corregir el déficit comercial negativo que Estados Unidos tiene con Europa y que aquí se le maltrata por las trabas a sus exportaciones de coches y otros bienes.
Sigue sin concretar ni de cuánto serán esos aranceles ni cuándo comenzarían a aplicarse, da por hecho que habrá barreras para nuestros productos:
El ministro de Agricultura, Luis Planas, ha respondido así a ese envite del presidente estadounidense:
Nueva protesta contra el acuerdo con Mercosur
Los agricultores europeos también miran con temor a América, pero más al sur, por el nuevo espacio comercial negociado con Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, los países de Mercosur.
El Ministerio de Agricultura, de hecho, confía en que tanto el acuerdo con Mercosur como la modificación del que ya existe con México, abra nuevas oportunidades para nuestras exportaciones.
Insiste Planas en que estos acuerdos supondrán la eliminación progresiva de aranceles para productos como el aceite de oliva, el vino o las frutas, y, además, garantiza la protección a 59 indicaciones geográficas protegidas.
Por otro lado, el acuerdo global entre la Unión Europea y México, cuyas negociaciones de actualización concluyeron el pasado viernes, ofrece también interesantes oportunidades para las dos partes, aunque, dice Planas, aún es necesario analizar en profundidad los nuevos textos.
Pero esta idea del ministerio no acaba de convencer a gran parte de los agricultores. De hecho, con el lema Stop Mercosur, Asaja se suma hoy mismo a la protesta de los sindicatos agrícolas franceses y del COPA-COGECA, el organismo que agrupa a todas las asociaciones y cooperativas europeas, en Estrasburgo, a las puertas del parlamento europeo y coincidiendo con la celebración del pleno donde, a buen seguro, la tensión comercial internacional se va a colar en gran parte de los debates.
Los agricultores insisten en que, aunque hay que abrir relaciones comerciales, no puede hacerse a cualquier precio y que hay algunos sectores que, en estos acuerdos, se enfrentan a riesgos de saturación del mercado con productos a bajo coste procedentes de países del Mercosur, elaborados, además, con menores exigencias sanitarias, ambientales y laborales, compitiendo en ventaja y de manera desleal.