El Vaticano conocía la existencia de abusos sexuales en Pensilvania desde 1963
El Vaticano conocía la existencia de abusos sexuales en Pensilvania (Estados Unidos) por parte de sacerdotes a menores, desde el año 1963. Así lo desvela la investigación realizada por el Gran Jurado, que confirma cómo la Iglesia ocultó los abusos continuos de, al menos, 300 sacerdotes a más de mil niños y niñas.
"Vergüenza y dolor" son las palabras que el portavoz del Vaticano, Greg Burke, dice sentir la Santa Sede ante el descubrimiento de los abusos sexuales a menores en Pensilvania. Ahora condenan estos crímenes pero lo cierto es que han callado durante más de cinco décadas, según se extrae de la investigación.
La palabra Vaticano aparece 45 veces en el informe del Gran Jurado de Pensilvania. La primera vez es en 1963 y la última, en 2015 cuando ya era papa Francisco I.
Roma fue informada de las agresiones sexuales y de que la Iglesia estadounidense estaba encubriendo a los curas pederastas, cambiándolos de parroquias o retirándolos durante un tiempo.
"La iglesia os falló y por eso me disculpo" ha dicho Kevin Rhoades, exobispo de Harrisburg (Pensilvania). Pero en su momento fue, al parecer, uno de lo que tapó las acusaciones. Mientras, el actual arzobispo de Pensilvania, Charles J. Chaput, se ha comprometido a hacer los esfuerzos necesarios para que esto nunca vuelva a ocurrir.
Ahora todos se lamentan pero durante 60 o 70 años frente la violaciones, las vejaciones, las torturas y los abusos a niños y niñas solo reinó el silencio
Casos ya prescritos
La Corte Suprema de Pensilvania publicaba esta semana un informe de un Gran Jurado que documenta 300 supuestos casos de "sacerdotes depredadores" sexuales en seis de las ocho diócesis del estado, tras investigar denuncias de abusos de menores, informe en el que identifica a 1.000 menores como víctimas desde 1940.
El informe es el "más amplio y exhaustivo sobre el abuso sexual infantil dentro de la Iglesia Católica jamás producido en Estados Unidos", según aseguraba el fiscal general de Pensilvania, Josh Shapiro. En este documento el jurado critica que todos los casos fueron dejados de lado por la jerarquía católica, "que prefirió proteger a los abusadores y a la institución, sobre todo".
Casi todos los delitos son demasiado antiguos como para ser juzgados, pues son anteriores a 2000, por lo que no habrá justicia para las víctimas ya que han prescrito y muchos de los agresores han fallecido.
▶En Pensilvania más de 300 sacerdotes abusaron de más de 1.000 menores durante 7 décadas
El informe de Pensilvania es el último después de un escándalo que estalló en el escenario mundial en 2002, cuando el diario 'Boston Globe' informó de que, durante décadas, los sacerdotes habían agredido sexualmente a menores mientras que los líderes de la Iglesia ocultaban sus crímenes.
EP | CMM