La UE obligará, por primera vez, a medir y eliminar la concentración de gas radón en viviendas y centros de trabajo

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Redacción CMM
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El radón se produce, de forma natural, en el subsuelo y emana a la superficie. Se produce más radón en zonas graníticas que en las arcillosas o calcáreas, por el contenido de uranio, el elemento origen de este gas. Otras condiciones como la humedad, presión atmosférica y temperatura también inciden en los niveles de radón en el aire. Así en un suelo húmedo y permeable con una presión atmosférica baja y una temperatura suave favorece la emanación de este gas. Es más fácil encontrar gas radón en casas bajas porque pesa más que el aire y tiende a depositarse en las zonas bajas de los edificios como garajes o sótanos, así como lugares con poca ventilación.

Finalmente, la Unión Europea ha reconocido los riesgos para la salud y obligará, desde el próximo año, a los gobiernos a medir y eliminar la concentración de gas radón en viviendas y en centros de trabajo que registren como mínimo 300 becquerelios por metro cúbico (unidad de medida empleada del gas radón)  Sin embargo, la OMS (Organización Mundial de la Salud) fija en 100 la frontera del peligro.

Según el Consejo de Seguridad Nuclear, varias zonas de Castilla-La Mancha están entre las de mayor riesgo de España.

Segunda causa de cáncer pulmonar tras el tabaco

El radón ocupa el segundo lugar en la lista de las principales causas de cáncer pulmonar en muchos países. Se calcula que el radón causa entre 3% y 14% de los cánceres pulmonares, lo que depende de la concentración promedio de este gas en cada país. Las probabilidades de que el radón cause cáncer pulmonar en los fumadores son mucho mayores, y este gas es la causa principal de esta neoplasia maligna en quienes no fuman. Los cánceres pulmonares causados por el radón no están vinculados con las concentraciones altas sino con las bajas y moderadas, debido al gran número de personas expuestas al gas en el interior de las viviendas, que es donde se alcanzan estas concentraciones. Cuanto más baja es la concentración de radón en una vivienda, menor es el riesgo; sin embargo, no se conoce un umbral por debajo del cual la exposición a este gas no entrañe riesgo.