PORNOGRAFÍA
Seis de cada diez jóvenes en España consumen pornografía y la mitad admite que ve demasiado
La primera vez que acceden al porno es a los 13 años, según datos de la Fundación Fad Juventud
Joven mirando un ordenador
Seis de cada diez jóvenes en España (62,5%) consumen pornografía, un 72,2% en el caso de los chicos. De estos, casi la mitad admite que ve demasiado (45,8 %) y que ha intentado reducirlo pero no ha podido (45,7 %).
Estas son algunas de las cifras del informe "Juventud y pornografía en la era digital. Consumo, percepción y efectos" de la Fundación Fad Juventud. Para este informe han realizado una encuesta a 1.259 personas entre 16 y 19 años y entrevista a expertos en sexualidad, educación y género.
Los jóvenes ven demasiado porno
La mitad de los jóvenes que ve porno cree que ve demasiado y reconoce que ha intentado bajar el consumo sin éxito. Para el 35%, el porno afecta negativamente a ámbito importantes de su vida, como el rendimiento educativo/laboral o el sueño.
El 52,6% de los jóvenes que invierten dinero en pornografía ha sentido en algún momento que gastaba demasiado dinero en ello.
En la otra cara de la moneda, el informe apunta que "en general, el porno influye mucho o bastante en aspectos positivos de la sexualidad" de los jóvenes. En este sentido, casi el 60% de los consumidores señala que le ha llevado a experimentar más en sus relaciones, a conocer y comprender mejor el sexo y a tener una mayor satisfacción.
Índices, todos ellos, en los que destacan notablemente los chicos por encima de las chicas.
Los chicos ven más porno y lo consumen antes de los 13 años
Por sexo, son ellos los que consumen más porno, de cualquier tipo. El 22,4% de los chicos ven porno diariamente y la mitad (48,1%), al menos una vez por semana, frente al 2,1 % y el 13,6 % de las chicas.
La mayoría accede por primera vez a este contenido alrededor de los 13 años, aunque ellos suelen conocerlo antes, y el 49,5% lo señala como una fuente de inspiración para sus relaciones.
El "porno duro", el que más se consume
El 55,8% de los jóvenes consumidores ve porno con violencia. Por tanto, el estudio concluye que el porno más popular es el "porno duro", el que muestra desnudos integrales y actos sexuales explícitos. Más de la mitad del total de jóvenes que ve porno, admite que consume este tipo de porno que muestra violencia física o verbal, ya sea de forma ocasional (31,3 %), con cierta frecuencia (14,2 %) o con mucha (el 10,3 %).
Además, cuatro de cada diez jóvenes consumidores ve contenido con violencia extrema o en el que se exhiben humillaciones.
Machismo, misoginia y violencia sexual
Los jóvenes en general, pero sobre todo ellas, creen que es frecuente encontrar en el porno violencia física (45,9 % de las chicas frente a 31,5 % de los chicos ). Por otro lado, un 43,9% de las chicas cree que es frecuente encontrar contenido machista y misógino en el porno, frente al 26,2% de los chicos.
El 41,7% de las chicas considera que en el porno puede encontrar violaciones o abusos sexuales, y un 25,5 % de los chicos lo cree. Así como un 29.9% de ellas piensan que se muestran contenidos pedófilos o de abusos a menores, frente a un 14,8% de ellos.
De todos los jóvenes, consumidores o no, el 37 % cree que el porno fomenta la violencia sexual y un 43,1, que discrimina con frecuencia a las mujeres.
El 31% de los jóvenes consideran que el porno contribuye a generar fantasías sexuales en las que se ejerce o se recibe violencia.
Menor uso de preservativo por la pornografía
El 35,8% opina que la pornografía fomenta un menor uso del preservativo y alrededor del 30% que hay relación entre el consumo de pornografía y presionar a otras personas para tener sexo o realizar determinadas prácticas.
"El porno está jugando un papel educador porque el problema es que llega antes de que nadie les haya hablado de sexo"
El informe también se centra en la carencia en la educación afectivo-sexual de calidad en los jóvenes, ni por parte de su centro educativo ni por parte de su familia, por eso 6 de cada 10 jóvenes han buscado este tipo de información por su cuenta.