"Impactos climáticos destructivos" aunque se cumplan los compromisos de emisiones, advierte la ONU

Sara Santos Beato
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Tras conocer que, en 2018, hemos batido récords en la emisión de dióxido de carbono (CO2) y de otros gases de efecto invernadero, Naciones Unidas advierte que la temperatura media del planeta este siglo subiría 3,2 grados, incluso si cumplimos los compromisos de emisiones enmarcados en el Acuerdo de París.

El objetivo era no superar los 1,5 grados a finales de siglo pero, al ritmo que llevamos, la ONU advierte de que lo doblaremos, lo que traería "impactos climáticos destructivos". El estudio de la ONU concluye que las emisiones globales deben reducirse un 7,6% cada año entre 2020 y 2030 para cumplir el objetivo inicial.

Por ello, insisten a los países en que la ambición colectiva "debe aumentar más de cinco veces los niveles actuales para lograr los recortes necesarios".

Si aumentase así la temperatura, inundaciones como las de Cebolla en 2018, incendios como los de Yeste en 2017, y sequías y olas de calor como la de este verano irían en aumento hasta un punto de no retorno.

Revertir el cambio climático

En este sentido, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) ha anunciado que dejará de financiar a partir de final de 2021 proyectos de combustibles fósiles, incluido el gas. Una estrategia que "puede ser de gran utilidad para España", según la vicepresidenta del banco, Emma Navarro.

Más del 50% de los jóvenes creen que tendran que emigrar a otros países por los efectos del #CambioClimatico. Un dato más para la reflexión de la Encuesta del #BEI que hemos publicado hoy. pic.twitter.com/yr7joGweQ6

En España, la emergencia climática figura en tercera posición (42 %) por detrás de la inestabilidad política (56 %) y el paro (72 %), según el informe del BEI elaborado junto con la consultora BVA. Además, los españoles son de los más optimistas sobre las posibilidades de revertir el cambio climático -un 70 % cree que estamos a tiempo- y el 80 % afirma que su comportamiento puede marcar una diferencia, diez puntos por encima de la media europea en ambos casos.

Los jóvenes europeos están más preocupados que sus mayores por la crisis climática, lo que no sorprende tras un 2019 marcado por los "Viernes por el Futuro". Científicos y ecologistas coinciden en la necesidad de bajar las emisiones, sin embargo, no debe ser un compromiso solo de los jóvenes sino de todos, aseguran, incluidos gobiernos y empresas.

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