INVESTIGACIÓN
Un exoesqueleto pediátrico "normaliza" el día a día de niños y niñas con parálisis cerebral
Un proyecto impulsado por investigadores españoles de Marsi Bionics, CSIC y los Hospitales Universitarios La Paz, 12 de Octubre, Niño Jesús y Gregorio Marañón de Madrid
Minerva, de 6 años, ya ha utilizado el exoesqueleto 'Explorer', impulsado por Marsi Bionics, el CSIC y los Hospitales Universitarios La Paz, 12 de Octubre, Niño Jesús y Gregorio Marañón.
Ver a Minerva, una niña de seis años con parálisis cerebral, jugando con sus amigas en el cole es uno de los usos cotidianos que permite "Exopler", un exoesqueletos de última tecnología que permiten a muchos niños y niñas con parálisis cerebral moverse con libertad y vivir con más independencia.
Este nuevo prototipo pediátrico ha sido desarrollado de forma conjunta por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y los Hospitales Universitarios La Paz, 12 de Octubre, Niño Jesús y Gregorio Marañón de Madrid, junto con la empresa Marsi Bionics.
'Explorer' podrá usarse por los niños con alteración de la marcha en casa, en el colegio, en el parque y en otros espacios exteriores.
La madre de Minerva ha celebrado esta innovación, con la que su hija "está muy cómoda" y "disfruta". Gracias al exoesqueleto, su hija es capaz de dar pasos, disociar las piernas o subirse a un taburete para lavarse los dientes.
Marsi Bionics ya había desarrollado, en colaboración con el CSIC 'Atlas 2030', el primer exoesqueleto pediátrico del mundo, pero cuyo uso es exclusivamente clínico. Su CEO, Elena García Armada, ha explicado que a partir de este dispositivo nació 'Explorer', ya que los niños cuando lo probaban en los entornos hospitalarios, y ganaban confianza con el mismo, enseguida pedían poder llevárselo a casa y al colegio.
"Al ponerse de pie un niño con un exoesqueleto, lo primero que se da cuenta es que el mundo le cambia, por supuesto, le cambia la perspectiva, pero sobre todo hay una cierta autonomía que le permite jugar (...) Algunos empiezan a hacer otro tipo de juegos, que no son tan juegos, es más una actividad de la vida cotidiana, como 'me voy a acercar a esa mesa que con un teléfono voy a llamar a mi madre' (...) Empiezan ellos mismos a darse cuenta de que esto es una herramienta que les permite una cierta integración social y una cierta exploración del mundo", ha detallado.
Jorge, el primer niño que fue al cole con exoesqueleto
El primer niño al que se le permitió llevar el exoesqueleto a su colegio fue a Jorge. El día de su cumpleaños entró a clase presumiendo de este dispositivo y explicándole a sus compañeros cómo funcionaba.
El exoesqueleto 'Explorer' es un robot compuesto por una serie de músculos artificiales que aportan un complemento a la fuerza del niño, permitiendo la movilidad de las piernas. En concreto, dispone de cuatro motores que imitan el funcionamiento natural del músculo y dos modos de funcionamiento, de forma que uno de ellos completa la fuerza del usuario para avanzar en la marcha y el otro proporciona un movimiento constante a la velocidad seleccionada.
Además, 'Explorer', que se encuentra en fase de prototipo y pendiente del marcado CE, cuenta con un asiento automático que permite transformar el dispositivo en una silla de descanso integrada, facilitando el uso continuo y la comodidad del niño en su día a día.
Cada dispositivo evolucionará con el propio crecimiento del niño, abarcando un rango de edad aproximado desde lo dos hasta los 17 años, lo que permite un acompañamiento a lo largo de su desarrollo. De esta forma, el uso en exteriores del exoesqueleto favorecerá la rehabilitación, pero también la inclusión y la participación de los menores en actividades diarias.
"Va a cambiar la vida de sus familias, ofreciéndoles una herramienta segura y accesible para acompañarles en su crecimiento. Va a cambiar nuestra sociedad, porque una sociedad que apuesta por la inclusión y la innovación es una sociedad que avanza", ha finalizado García.
30 investigadores de hospitales madrileños involucrados en el proyecto
Para el desarrollo del exoesqueleto, casi 30 investigadores de los hospitales madrileños La Paz, 12 de Octubre, Niño Jesús y Gregorio Marañón han trabajado tanto con las familias como con Marsi Bionics.
Así, han estado involucrados en el ensayo clínico en el que han participado cerca de 50 familias para garantizar la seguridad y la eficacia de 'Explorer'.
La jefa del Servicio de Rehabilitación del Hospital Universitario Gregorio Marañón y presidenta de la Sociedad Española de Rehabilitación Infantil, Olga Arroyo, ha señalado que se han realizado ocho sesiones con 'Explorer' en el entorno domiciliario, alrededores y en las escuelas, siendo en un 53 por ciento de ocasiones probado en interiores y en un 47 por ciento en exteriores. Así, se valoró que el dispositivo era seguro, pues no se produjo ningún efecto adverso grave y la satisfacción obtenida se tradujo en una puntuación de cuatro sobre cinco.