TRIBUNALES
Juicio a los implicados en una pelea con un muerto en un bar de Miguel Esteban
Los hechos se produjeron durante una discusión entre los acusados, pareja y ex pareja sentimental de la dueña del bar en ese momento
Establecimiento acordonado por la Guardia Civil el día después al suceso
Juicio en la Audiencia Provincial de Toledo contra tres hombres, presuntamente implicados en una pelea en un bar de Miguel Esteban. De los tres acusados, uno acusado de encubrimiento ha quedado absuelto. A otro se le juzga por homicidio con una katana y al tercero por tentativa de homicidio.
Los hechos, que se juzgan por un jurado popular desde este lunes, ocurrieron el 30 de octubre de 2020. Según apunta el escrito de la Fiscalía, la ex pareja de la propietaria del bar y varios acompañantes acudieron al establecimiento para acabar con la vida del hombre que mantenía en ese momento una relación sentimental con la mujer y que se defendió de sus atacantes con una katana.
Por todo ello, el Ministerio Público pide para el principal acusado penas que suman 14 años y 3 meses prisión por un delito de homicidio consumado y otro de homicidio en grado de tentativa, aunque el Ministerio Fiscal reconoce la circunstancia atenuante de legítima defensa.
Por su parte, uno de los agresores se enfrenta a nueve años de cárcel por un delito de homicidio en grado de tentativa, aunque como alternativa contempla la pena de cinco años de prisión por un delito de lesiones con medio peligroso.
La declaración de los acusados
El principal acusado, para el que el Ministerio Público pide una pena de más de 14 años, ha asegurado que todo ocurrió al intentar defenderse del ataque de la expareja de su novia. Durante su declaración, ha lamentado la muerte y ha asegurado que solo quería "asustar" y defenderse.
También ha relatado que llevaba siete meses con su novia, gerente del bar donde ocurrieron los hechos, y que no conocía a su expareja. También ha negado que el arma fuera una katana y ha defendido que se trataba de un cuchillo que compró en Albacete y que tenía guardado en el coche. Asegura que lo cogió "por si acaso" cuando ella le comunicó las amenazas ya que, cuando llegan "amenazas de esa magnitud, te entra miedo y tienes que reaccionar".
