"Miedo" entre los transportistas castellanomanchegos en Francia por temor a sufrir daños físicos o en sus vehículos

La situación en Francia por las protestas de los agricultores ha provocado que los transportistas castellanomanchegos sientan "miedo" por los daños que sufrir, tanto a nivel físico como en sus vehículos, cuando son abordados en carreteras o autovías francesas. 

El secretario general de la Federación de Empresarios de Transporte de Castilla-La Mancha (Fetcam), Francisco Javier Martín Cameno, ha indicado que varios conductores han llegado a temer la reacción de los manifestantes. Desde las empresas, han pedido a los transportistas no exponer su vida y ser cautelosos en caso de enfrentamiento directo. 

Martín Cameno ha calificado de "violenta" la postura de los manifestantes, haciendo referencia a las intimidaciones que han lanzado contra camioneros españoles, llegando a amenazarles con  darles "una paliza de miedo". 

Temor por su "herramienta de trabajo": los camiones

Pero el miedo no es solo por su integridad física, también temen por su "herramienta de trabajo": sus camiones. Los costos de arreglar daños o desperfectos en los vehículos en territorio francés pueden multiplicarse en comparación con España. 

Los daños, además, no solo son causados por manifestantes. Debido a los cortes en las rutas de transporte, muchos camioneros han tenido que desviarse. Las alternativas pasan por carreteras secundarias, en ocasiones muy estrechas, y también por el interior de pueblos, donde pueden producirse graves daños en los camiones. 

Yolanda Martínez, gerente de la empresa 'Transportes Agustín Martínez' de Chiloeches (Guadalajara), ha explicado que cualquier "cosa que se rompa en un vehículo supone entre 800 y 1000 euros de coste", lo que se encarece si es en territorio francés. Allí, cambiar una rueda puede oscilar entre los 2000 y 2500 euros, mientras que en España el coste sería de entre 600 y 700 euros.

Otro de los problemas que presentan los cortes en Francia, además de los posibles daños y el incremento de tiempo por los atascos, son las pérdidas en productos, especialmente en el caso de los alimenticios. Aunque estos no son los únicos. Las empresas españolas no pueden cumplir con los plazos de entrega establecidos y los trabajadores no pueden volver a casa cuando estaba previsto, por lo que su tiempo de descanso se atrasa, así como la reanudación del trabajo.

Mientras, los agricultores franceses amenazan con quedarse en huelga indefinida, manteniendo los cortes en carreteras y autovías del país.