CASTILLA-LA MANCHA
García-Page: "La camiseta del PSOE no es de fuerza sino de libertad"
Tras el análisis de las elecciones gallegas, el presidente de Castilla-La Mancha responde a María Jesús Montero, la vicesecretaria general del PSOE
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha subrayado este miércoles que la camiseta del PSOE no es de fuerza sino de libertad y agrega que la defiende "desde mucho antes de los que ahora las reparten".
Durante la inauguración del foro de El Confidencial 'Castilla-La Mancha, destino inversor', en Toledo, García-Page ha respondido a la vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, quien tras el análisis electoral de los comicios gallegos que hizo García-Page le contestó que "uno siempre tiene que saber, cuando su equipo juega, cuál es la camiseta que uno lleva".
Como presidente la "única camiseta" que defiende es su tierra
Emiliano García-Page ha replicado que como presidente de Castilla-La Mancha, la "única camiseta" que defiende es su tierra, pero como "animal político" y persona "concienciada políticamente", siempre ha tenido una sola camiseta, la del PSOE, incluso "desde mucho antes de los que ahora las reparten".
"Siempre he tenido la misma camiseta y, además, he defendido la misma camiseta hasta el punto de conseguir algún que otro trofeo", ha afirmado García-Page, quien ha precisado que la "camiseta del PSOE" no es "una camisa de fuerza" sino una "camisa de libertad, donde se pueden decir las cosas con el ánimo de mejorar
Además, ha criticado que se haya puesto de moda contestar a sus argumentos políticos "con ofensas o insinuaciones un tanto ofensivas", en las que no entrará, ha avanzado, porque "no es sano".
La lucha para que Puigdemont no "coloque la camisa de fuerza"
Y continuando con el símil de 'camisa de fuerza' ha dicho que lucha para que el expresident catalán Carles Puigdemont no "coloque" la "camisa de fuerza" a todas las instituciones del Estado y a la política española.
El presidente castellanomanchego también ha manifestado que el frentismo es el principal problema de la política española ya que el "bipartidismo imperfecto" tradicional fue sustituido por una "lucha de bloques" que es "mucho más fratricida" e impide el diálogo, porque, además, te lo impiden las "compañías".
Al respecto, ha defendido que el PSOE tiene un metabolismo de ser "mayoritario", no un partido populista ni frentista sino un partido que ha capitalizado y vertebrado grandes conceptos y grandes mayorías; pero ha advertido de que "las compañías tiran hacia afuera del perímetro, te radicalizan o intentan hacerlo".
García-Page ha subrayado que todavía hay "posibilidad de acuerdo en el terreno de juego de la parte central" y ha considerado que es "muy difícil avanzar" con la "dosis de frentismo" que hay en la política española y que hay que recuperar la posibilidad de "grandes acuerdos", aunque decirlo parezca "un sacrilegio", ha apuntado