EN COMPAÑÍA

Ana Velasco: "En la moda nuestras abuelas eran más modernas de lo que imaginamos"

La historiadora presenta en nuestro plató su quinto libro “La boda en el franquismo”.

Redacción CMM
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Hoy en el plató de En Compañía viajamos en el tiempo, con Ana Velasco, periodista, historiadora de mora y profesora universitaria, hasta los años 40 y 50 para comprobar que nuestras abuelas eran más modernas de lo que pensábamos.  Además, la historiadora presenta su quinto libro “La boda en el franquismo”.

Según nos cuenta Ana, la inspiración para la moda femenina en los años 40 y 50 en España venía por el cine. La mayoría de nuestras abuelas sabían coser y se hacían trajes inspirados en los que veían en la gran pantalla.

Destaca también que ir bien peinadas era muy importante a mediados del siglo pasado y la peluquería era un centro social.

“Tenemos el prejuicio de que nuestras abuelas siempre iban de luto, pero eran más modernas de lo que nos imaginamos”.Ana Velasco, periodista, historiadora de mora y profesora universitaria.

Además, Ana Velasco cuenta que “las chicas topolino” fueron muy populares en los 40 y el modelo de las adolescentes. Eran mujeres modernas, peinadas al estilo Hollywood, con el pelo teñido, que iban muy maquilladas y su rasgo distintivo eran los zapatos topolino, que eran los apodados ‘zapatos de coja’.

Otro de los artículos más destacados de esa época son las medias, que eran un artículo muy valioso en la posguerra por la escasez de seda. Las que tenían un par de medias las cuidaban como oro en paño y las lavaban y zurcían con muchísimo cuidado.

Y las que no tenían medias se las pintaban, para quela gente que pensaba que si que las llevaban porque estaba mal visto ir sin ellas. Incluso, había un dicho que decía “mujer sin medias, pájaro sin plumas”.

En las bodas resaltaba la importancia de la tela del vestido de la novia que solía ser de tul ilusión.

En Compañía, se emite de lunes a viernes, a las 15:45 horas, en Castilla-La Mancha Media, un programa que tiene como objetivo ayudar a poner fin a la soledad de los castellanomanchegos. Un problema que, a día de hoy, afecta a miles de personas y que es una gran preocupación en la sociedad del siglo XXI.

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