Kenia pide paz en sus elecciones generales
Kenia elige hoy a su nuevo presidente. Unas elecciones que vienen marcadas por el llamamiento a la calma para evitar se repita la violencia postelectoral de 2007. También por el nuevo sistema de identificación biométrica que está "ralentizando la votación y generando algunos fallos", según Adbullahi Boru, uno de los observadores internacionales que cotejan el proceso.
Esta ralentización está provocando largas colas ante las urnas y algunos altercados entre los propios votantes. Al menos 24 personas han resultado heridas por una estampida ocurrida en un céntrico colegio electoral de Nairobi. El incidente ha ocurrido a primera hora de la mañana al abrirse las puertas del centro de votación del Moi Avenue Primary School, una de las principales arterias de la capital keniana. Centenares de personas que aguardaban desde hacía horas para ejercer su derecho al voto se han abalanzado sobre la puerta provocando una estampida en la que 24 personas sufrieron heridas por las que tuvieron que ser atendidas en centros hospitalarios. Este ha sido uno de los escasos incidentes registrados en la jornada electoral hasta el momento.
En esta ocasión, los electores deben autentificar su identidad mediante un lector digital de huellas que, en muchos casos, requiere de varios intentos para que reconozca a la persona. Cuando, tras varios intentos, sigue sin funcionar, el voto de esa persona queda en un limbo de difícil solución.
Con el objetivo de evitar las irregularidades en estas elecciones, cuando la persona deposita su voto en la urna es marcada con un rotulador en la uña de la mano, para controlar que ya ha ejercido su derecho de votar.
En estas elecciones, se enfrentan dos grandes candidatos, aunque en total se presentan ocho. El actual presidente, Uhuru Kenyatta, y el líder opositor, Raila Odinga. Ambos, se han lanzado acusaciones durante la campaña sobre posibles amaños de las elecciones. Los dos aspirantes a la presidencia están convencidos de su victoria, pero advierten de que en esta ocasión juegan con nuevas reglas y que el sistema de identificación biométrica puede desembocar en resultados imprevisibles. En total, 19 millones de kenianos están llamados a las urnas, de los que un 51 % son menores de 35 años.
Si funciona el sistema de transmisión electrónica de votos implantado por la IEBC, los resultados podrían empezar a conocerse a medianoche, aunque algo menos de un tercio de los colegios electorales no tenían una cobertura móvil adecuada
Obama llama a la calma
El expresidente de Estados Unidos Barack Obama, de ascendencia keniana, ha enviado un mensaje de tranquilidad para evitar los altercados de las últimas elecciones y ha pedido que se rechace la violencia "sin miedo ni división".
Unos 180.000 agentes de seguridad patrullan estos días las principales ciudades kenianas para sofocar cualquier conato de violencia y eso se nota en la rutina diaria. "Normalmente tardo 15 minutos en llenar mi minibús y ya llevo tres horas esperando. Es un desastre", cuenta Willy Fiyukundi, conductor en Nairobi, al diario británico 'The Guardian'.
En este contexto, Kenyatta aprovechó su cierre de campaña para llamar a la calma: "No permitáis que nada abra una brecha entre vosotros. Habéis sido buenos vecinos y os pido que sigáis siéndolo independientemente de vuestra tribu, vuestra etnia, vuestra religión o vuestra filiación política"
CMM-AGENCIAS