24 horas de violencia ponen en jaque a Irak
Al menos 35 personas han muerto y más de 350 personas han resultado heridas en Irak tras los graves enfrentamientos que han estallado en el país después de conocerse que el clérigo chií Muqtada al Sadr se retira de la vida política, según fuentes recogidas por Al Yazira. Al Sadr había ganado las elecciones, pero no ha podido formar gobierno en meses.
Al Sadr ha dado un ultimátum a los manifestantes para que se retiren en menos de una hora de la Zona Verde en Bagdad, donde se encuentran las principales instituciones gubernamentales y diplomáticas, según ha recogido la agencia de noticias NINA.
"Independientemente de quién comenzó ayer la lucha, camino con la cabeza gacha y pido disculpas al pueblo iraquí, que es el único afectado por lo que está pasando", ha explicado el clérigo chií, agregando que su retiro de la política es "definitivo".
Por su parte, el primer ministro del país, Mustafá al Kazemi, ha elogiado las palabras de Al Sadr pidiendo el fin de la violencia como "el epítome del patriotismo y el respeto a la santidad de la sangre iraquí".
"Su discurso impone a todos el deber nacional y moral de proteger Irak y detener la escalada política y la violencia y entablar un diálogo de inmediato", ha recalcado Al Kazemi en su perfil de Twitter:
His Eminence Muqtada Al-Sadr’s call to stop violence is the epitome of patriotism and respect to the sanctity of Iraqi blood.
Tras las palabras de Al Sadr, el portal de noticias Shafaq ha informado de que los manifestantes han empezado a abandonar la Zona Verde de la capital, al tiempo que las autoridades han decidido levantar el toque de queda a nivel nacional que se decretó hace menos de 24 horas.
En el marco de los enfrentamientos, el Ministerio del Interior de Irán ha anunciado el cierre de las fronteras terrestres con Irak hasta nuevo aviso y ha recomendado a sus ciudadanos que no visiten en país, según ha recogido la agencia de noticias IRNA.
Irán se suma así a las embajadas de distintos países, como la de Canadá y Turquía, que también han empezado a emitir avisos a sus ciudadanos ante la escalada de violencia que vive el país por las protestas que han estallado en Bagdad y que se han extendido a otras zonas del país, como Basora y Samarra.
En los últimos meses Irak ha sido escenario de una gran escalada de la tensión política debido a la parálisis, dado que tanto el Poder Judicial como el Parlamento suspendieron su actividad, y el Gobierno aún está en funciones, y lleva ya meses.
La causa inmediata de este último episodio sangriento está en la creciente y violenta rivalidad entre las facciones de la comunidad chií mayoritaria de Irak, que compiten por el control del país y el estado.
Agencias/BBC