¿Sirven las pruebas caseras para comprobar las mascarillas de tela?

Desde que las mascarillas llegaron a nuestra vida, son muchas las versiones que van apareciendo en el mercado. También han proliferado los vídeos que se han hecho virales sobre la forma de comprobar su efectividad. Uno, en particular, en el que un hombre trata de apagar una vela con los distintos tipos de mascarillas, tiene más de medio millón de reproducciones sólo en Twitter y ha circulado por las cadenas de Whatsapp.

Para arrojar algo de luz sobre este asunto, CMM Digital ha hablado con la Asociación de Empresas de Equipos de Protección Individual, que agrupa a los fabricantes y distribuidores en España.

¿Podemos comprobar su eficacia con experimentos caseros?

La realidad es que "estas pruebas caseras no se parecen en nada a los ensayos realizados en los laboratorios que las fabrican" y son de eficacia "dudosa", asegura a CMM Digital el responsable técnico de ASEPAL, Javier Díaz Alonso.

Me parece bien que te guste llevar una mascarilla molona pero te animo a hacer esta prueba en casa...

En aquellas en las que se apaga una vela a través de una mascarilla, "lo único que mide es la capacidad que tiene para que pase el aire a través de la mascarilla".

¿Cómo sé que son efectivas?

La clave es la etiqueta. Es la mejor guía, apunta el responsable técnico de ASEPAL. En la ficha del producto se deben encontrar las recomendaciones de lavado del fabricante, el número de lavados que soporta, composición, periodo y tiempo recomendado de uso. También destaca la importancia de que en ella se especifique la eficacia de filtración y respirabilidad.

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A lo largo de la pandemia, distintos países han desarrollado especificaciones técnicas destinadas a establecer unos mínimos para medir la efectividad de estas mascarillas higiénicas. En España, UNE desarrolló las normas UNE 0064, para mascarillas higiénicas desechables; y la UNE 0065, para mascarillas higiénicas reutilizables.

Pero hay que tener en cuenta un detalle importante que es que el cumplimiento de las normas UNE, no es obligatorio para la comercialización de las mascarillas en España, y puede darse el caso de que haya mascarillas higiénicas que se comercialicen en base a lo establecido en cualquier otra norma, especificación, o alegando el cumplimiento de determinados tipos de niveles de prestación. En cualquier caso, siempre y cuando una mascarilla alegue cumplimiento con una determinada propiedad, o característica, el fabricante deberá poder presentar pruebas de dicho cumplimiento.  En relación a este hecho, el Ministerio de Industria recuerda que las mascarillas higiénicas no pueden “estar etiquetadas o publicitarse como “FFP2”, o como equivalentes y su información y etiquetado debe ser claro y no dar pie a confusión al consumidor”.

¿Qué debo tener en cuenta ?

Javier Díaz nos recuerda que las mascarillas, independientemente del tipo de la que hablemos, se ajusten a los requerimientos de comercialización aplicables en cada caso, para que su utilización sea segura por parte de los usuarios. Por ello, hay que leer y seguir "escrupulosamente" las indicaciones de la etiqueta porque si no "entraríamos en terreno desconocido", advierte el responsable de ASEPAL.

Nos recuerda además que estos productos no tienen una fecha máxima de duración de uso diario, lo que recoge es una recomendación: no utilizar más de 4 horas, por una cuestión de comodidad o de higiene.

Y en el caso de las pruebas caseras la información obtenido no tiene reflejo o relación con las características que se ensayan en los laboratorios porque "si no cualquiera podría fabricarlas".

Si se cumplen sus normas de uso, estaremos protegidos frente al coronavirus y el mayor peligro será "caer en algunos de los bulos más populares de los 'antimascarillas'".

Las de tela son para evitar contagiar

Hay que recordar que las mascarillas higiénicas reutilizables, comúnmente conocidas como "de tela", no son productos para evitar contagiarse: lo que hacen, en realidad, es proteger a los demás.

Además según apunta la ASEPAL, las mascarillas higiénicas se han convertido en una prenda más de nuestra indumentaria diaria. Pero advierte de que este tipo de mascarilla no se considera ni un EPI (mascarilla autofiltrante), ni un dispositivo médico (mascarilla quirúrgica). Se trata de un equipo que se utiliza como complemento a las medidas de higiene básicas tales como el distanciamiento social o el lavado de manos, al cubrir la nariz, boca y barbilla del portador.

Estas mascarillas son para la población sana, que no presente síntomas de la COVID-19, siguiendo las medidas de higiene y de distanciamiento social establecidas por las autoridades sanitarias.