Juana Rivas en libertad provisional tras pasar por los juzgados de Granada
Era una de las imágenes más esperadas del días. La llegada de Juana Rivas a los juzgados para comparecer ante el juez tras casi un mes en paradero desconocido, desde que a finales de julio incumplió la orden de entrega de sus hijos a su padre italiano, denunciado por malos tratos.
Juana Rivas entraba por el garaje y no se le ha visto hasta la salida de la institución judicial que con lágrimas agradecía a los allí congregados el apoyo profesado.
Tras comparecer en los juzgados de Granada, el juez ha decretado libertad provisional para Juana, pero seguirá siendo investigada por supuestos delitos de sustracción ilegal de menores y desobediencia a la justicia.
En los juzgados de Granada se habían congregado al menos un centenar de personas para apoyar a esta mujer, víctima de malos tratos, que hasta ahora se ha negado a restituir a dos niños, de 3 y 11 años, con su padre en Italia.
"Todos somos Juana", "Un maltratador no es un buen padre", "Frente a los maltratadores, protección a los menores", "Nos tocan a una, nos tocan a todas", han sido algunas de las consignas escuchadas a las puertas de los juzgados.
Tribunal Superior de Justicia andaluz confirma detención
El Tribuna Superior de Justicia andaluz ha confirmado la detención de Juana Rivas. Ha sido detenida por la Policía Nacional y se encuentra a la espera de declarar ante el juez de guardia, ha informado el Tribunal Superior de Justicia andaluz.
Rivas, custodiada por la Policía, ha sido introducida en un vehículo policial en el parking público de La Caleta y desde este ha sido trasladada al aparcamiento de los juzgados.
Quiere que su hijo pueda declarar ante el juez
Su representante, Francisca Granados, ha explicado que Juana "no puede seguir luchando sola" y que ha decidido entregarse "por el bien de sus hijos".Rivas tiene "asumidas las consecuencias que se puedan derivar", ha dicho, pero "sigue confiando en la Justicia española".
Asimismo, la asesora jurídica de Juana Rivas alega que no sabe dónde están los menores, y reitera que Juana "hoy está aquí por encima de sus intereses personales y por encima de ella" y que pedirá al juez que pueda comparecer su hijo de 11 años y medio.
La madre de Maracena pone fin, así, a una desaparición voluntaria que comenzó el 26 de julio, cuando no compareció a la cita para entregar a sus dos hijos al padre, el italiano Francesco Arcuri, por resolución judicial tras haber abandonado Italia, donde residían y negarse a volver, aludiendo a los malos tratos que le infligía su ex pareja, condenado en 2009 por un episodio de violencia doméstica.
La historia de Juana Rivas
El Juzgado de Instrucción 2 de Granada decretó la vigente orden de detención y presentación en sede judicial que pesa sobre Juana Rivas después de que el pasado 8 de agosto, cuando las partes estaban citadas, la mujer no compareciera en este órgano que lleva la causa por la vía penal.
Rivas tampoco acudió este lunes a otra citación judicial que tenía por la vía civil, en el Juzgado de Primera Instancia 3, para decidir medidas de protección sobre los menores solicitadas para el padre, Francesco Arcuri.
En la vista del lunes la titular del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada acordó la retirada del pasaporte de los dos niños así como la prohibición de su salida del territorio Schengen, sin autorización del padre o sin permiso judicial.
Pide ayuda a Mariano Rajoy
Mientras, Juana Rivas se ha dirigido por carta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para que interceda por ella y los menores. En una misiva con fecha 21 de agosto, que también dirige al fiscal general del Estado, José Manuel Maza, y "al presidente del Tribunal Constitucional, Manuel García-Pelayo", la mujer expone su situación y les traslada que ha estado haciendo "lo único que puede hacer como madre, proteger" a sus dos hijos, de 3 y 11 años.
En la carta de tres páginas, a la que ha tenido acceso Efe, recuerda que el pasado 18 de mayo del 2016 tuvo que "huir del infierno" en el que vivían sus hijos y ella en Italia, "sometidos a la violencia diaria de su padre", Francesco Arcuri. "Él es un maltratador reincidente", subraya en el escrito Juana Rivas, que relata que ella y sus hijos nacidos en España han vivido "historias de terror en completa soledad, un maltrato severo físico y psicológico" y que, desde el punto de vista legal, también son "víctimas de toda una cadena de despropósitos e injusticias".