TOLEDO
Las 90 familias que continúan en el cuartel tendrán una monitorización técnica de su vivienda
Podrán permanecer en sus viviendas pero con medidas de control, como limitaciones de peso, en esta segunda fase del desalojo
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Comandancia de la Guardia Civil de Toledo.
Comienza la segunda fase del desalojo de emergencia del cuartel de la Guardia Civil de Toledo. Una vez finalizada la primera fase, que afecta a 75 familias, el resto de afectados, 90 familias, podrán permanecer en sus viviendas pero con unas limitaciones de peso determinados por el servicio de acuartelamiento de la Dirección General de la Guardia Civil y sometidos a monitorización técnica mediante visitas de inspección de los edificios.
Estas actividades de control se desarrollarán antes y durante las obras de demolición. Y ante la incertidumbre que supone cualquier obra de demolición, desde la Guardia Civil advierten de que pueden adoptarse medidas urgentes y extraordinarias, "incluyendo el desalojo inmediato", informa la Benemérita en nota de prensa.
La Oficina de Ayuda a los Afectados seguirá en funcionamiento durante todo el proceso hasta el completo desalojo del acuartelamiento y se realizarán sesiones informativas -como hasta ahora- con los afectados.
A los afectados se les ha informado de la oferta de vivienda que hay en este momento, 62 pabellones en buen estado de los que 23 se encuentran a menos de 60 kilómetros de la capital de la Guardia Civil.
Como oferta externa hay 124 viviendas de particulares ofrecidas a través de entidades públicas y privada y 6 viviendas ofertadas por la Diputación de Toledo.
En lo referente a la mudanza de enseres, de entre los afectados por esta segunda fase, a partir de este momento, quien así lo desee podrá solicitar la mudanza con idéntico procedimiento que en la primera fase del desalojo.
Tiempos de ejecución de esta segunda fase
En lo referente a los tiempos de ejecución de la segunda fase, los datos de los que se disponen son:
Una vez que se asigne la obra de demolición, la empresa adjudicataria dispone de un mes para el inicio de los trabajos. La demolición de los bloques desalojados en la primera fase tiene un plazo de ejecución máximo de diez meses, si bien el plazo estimado para este tipo de trabajo, sin que aparezcan incidencias, tendría una duración estimada de 5 meses.
Estos tiempos estimados de ejecución están sujetos a variaciones en función de las incidencias que pudieran surgir, especialmente aquellas que afecten a la seguridad de las personas.
En unas condiciones normales, el desalojo de los bloques afectados por esta segunda fase no se ejecutará inmediatamente una vez finalizados los trabajos de demolición, sino que, con el objetivo de beneficiar al máximo a los adjudicatarios, la Dirección General de la Guardia Civil tiene previsto dar esta orden cuando finalicen las gestiones del anteproyecto, proyecto y licitación de obra del nuevo cuartel.
En lo que respecta a la ubicación temporal de dependencias oficiales por parte de la Jefatura de Zona se viene trabajando con diferentes organismos, instituciones públicas y privadas, para analizar la oferta de espacios disponibles que puedan albergar temporalmente la Zona de Castilla La Mancha, la Comandancia y el Sector de Tráfico.