Así era Toledo en 1958

De vez en cuando, la Filmoteca Histórica de Toledo encuentra alguna joya y la comparte para que todos disfrutemos de ella. La última grabación nos muestra cómo era la vida en la ciudad a mediados del siglo XX. 

Pueden parecer muy lejanas en el tiempo, pero seguro que a alguno de nosotros nos lo han contado nuestros padres o abuelos.

Son imágenes grabadas en Toledo, Zocodover sigue casi igual a día de hoy, pero muchas de las escenas se estaban viviendo de forma similar en muchos puntos de España. Los burros, en esa época, formaban parte de cualquier paisaje.

Nuestro país vivía por aquel entonces en blanco y negro, pero los ojos de un artista francés, aficionado al cine, captaron nuestro día a día en color, porque de color eran ya la artesanía y los souvenirs que se le vendían a los turistas.

No falta la venta ambulante de cerámica, queso, ajos o pan, ni los puestos puestos callejeros, que estaban ya en la plaza donde se encuentra el mercado de abastos actual, junto al Teatro de Rojas.

Como tampoco le faltaban turistas al Museo del Greco, que ya era una realidad entonces.

Lo único que se echa en falta en las imágenes grabadas entre 1957 y 1958, es el sonido. Pero algunas escenas resultan tan familiares, que parece que nuestra cabeza se encarga de ponérselo.

Seguro que tampoco había mucha diferencia entre el murmullo de los viajeros que llegaban entonces en autobuses a los de ahora.

Con esta pequeña trampa de ponerle sonido a lo que no lo tiene, una advertencia más por si los más jóvenes tienen la tentación de pensar que todo aquello nos pilla ya muy lejos: pensad que aquel año nacieron por ejemplo, Madonna, Michael Jackson, Luz Casal, José Coronado... o Jordi Hurtado.

Merece la pena darse una vuelta por el canal de Youtue de la Real Academia De Bellas Artes de Toledo. Éste ha sido el último, pero cada vídeo que comparten es un viaje gratis en la máquina del tiempo.

Se trata de una grabación francesa

Es una valiosa grabación a color de la vida cotidiana de Toledo en 1958. Se trata la parte toledana de un proyecto amateur titulado Sud-Express, desarrollado entre 1957 y 1958 por Georges-Marcel Renard.

Se observan diferentes espacios de la ciudad muy reconocibles (Zocodover, Puerta de Bisagra, Santiago del Arrabal, huerta del Granadal, Santo Tomé, San Justo, judería, vistas panorámicas…).

El río Tajo es también protagonista, con varias escenas grabadas en los puentes, donde se ve su por entonces abundante caudal. Son destacables varias curiosidades, como por ejemplo ver el Castillo de San Servando recién restaurado, el alcázar aún en reconstrucción o el entrañable autobús de la línea Madrid-Toledo de la empresa Galiano.