Termina el año hidrológico con datos preocupantes

Desciende el nivel del agua en la cabecera del río Tajo. La Asociación de Municipios Ribereños aseguró ya a mediados de agosto que, en apenas dos semanas, los embalses de Entrepeñas y Buendía habían perdido el equivalente en agua a 33 veces un estadio de fútbol como el Santiago Bernabéu. Los niveles de los pantanos estaban por debajo del 21% de su capacidad total. Y desde entonces la situación ha empeorado, aunque la situación no es tan alarmante en el resto de la cuenca.

Ahora, se cierra el año hidrológico y lo hace con datos aún más bajos. A primeros de esta semana, Entrepeñas y Buendía estaban a menos del 18% de su capacidad. 441 hectómetros cúbicos. El clima y la política son las claves, dicen, pero las previsiones que tienen no paracen halagüeñas. Ni para El Tajo ni para otras cuencas, como la del Júcar que cierra el año con un 26% de capacidad y la del Guadiana con más de un 57%.

Según la consejera de Fomento, Elena de la Cruz, la sensación del Gobierno es que no preocupa la sequía en Castilla-La Mancha. Insta a que se pongan en marcha las máquinas desaladoras en el levante.