Síntomas de un golpe de calor: ¿Cómo actuar y prevenirlos?

La primera ola de calor del verano está dejando temperaturas máximas de récord, tanto las diurnas como las nocturnas, para un mes de junio. Un mes en el que las olas de calor se han triplicado en comparación con años anteriores.

Por ello, es importante tomar todas las precauciones posibles ante estos episodios de calor extrema que pueden afectar gravemente a nuestra salud. Los mayores y los niños son los más vulnerables, al igual los enfermos, como por ejemplo, los pacientes de Alzheimer. Debemos estar preparados y, para ello, es imprescindible saber cómo detectarlos.

Estos son los síntomas de un golpe de calor

La exposición a temperaturas excesivas puede provocar problemas de salud como calambres, deshidratación, insolación, golpe de calor (con problemas multiorgánicos que pueden incluir síntomas tales como inestabilidad en la marcha, convulsiones e incluso coma), según informa el Ministerio de Sanidad.

Algunas de las primeras señales de alarma que pueden prever el inicio de un golpe de calor son los mareos o el agotamiento. Son la causa directa de una exposición prolongada al sol.

Otro de los síntomas más comunes sería el dolor de cabeza, vómitos, diarrea, piel caliente e, incluso, la pérdida del conocimiento. 

Relacionar estos síntomas con el golpe de calor es primordial, ya que si no se reacciona a tiempo puede provocar daños cerebrales e, incluso, la muerte.

En el caso de los bebés, alguno síntomas que pueden ayudarnos a detectar los golpes de calor son la somnolencia o lloros más insistentes de lo habitual.

¿Cómo actuar ante un golpe de calor?

Una vez detectados, la forma correcta de actuar ante un golpe de calor a un lugar fresco, refrescarle con paños fríos o, si se puede, baña a la persona con agua fresca.

Es importante que no le des nada de beber, tampoco agua, porque le podría sentar mal. El siguiente paso es avisar al 112 o acudir a un centro de urgencias. Estos son consejos del Ministerio de Sanidad.

¿Cómo prevenir un golpe de calor?

Antes de llegar a esto, lo más recomendable para prevenir un golpe de calor, en plena ola de calor, es extremar las precauciones: buscar la sombra, cubrirnos la cabeza, utilizar prendas transpirables, hidratarnos continuamente bebiendo sorbitos de agua, no ponerse a temperaturas muy altas, evitar los ambientes calurosos, aflojarse la ropa o  bañarse con agua fría. Si tenemos que estar a la intemperie convendría estar en la sombre, con la cabeza cubierta e hidratarse.

Sobre todo, estar en alerta y prestar mucha atención a las personas dependientes, mayores y niños.

¿Cómo se produce un golpe de calor?

El doctor José Barberán, jefe de Medicina Interna de HM Montepríncipe, explicaba en Radio Castilla-La Mancha que "el golpe de calor se produce cuando la temperatura corporal sube por una temperatura que haya en el medio ambiente".

"El organismo solamente trabaja entre 36 y 41 grados", por lo que el aumento de la temperatura corporal no es puntual, sino que ascendería poco a poco.

Cuando la temperatura corporal es mayor que estos 41 grados "comienza a alterarse el sistema termorregulador", lo cual afecta a todo el organismo, a todas las células, aunque, sobre todo, "a las células del sistema central", asegura el doctor.

El cerebro es el primero en alterarse y lo hace poco a poco. Los efectos de esta subida de la temperatura corporal se notarán después en otros órganos como el corazón, el pulmón o los riñones.