ENTREVISTA
Sacrificar al ganado es 'la única vía de actuación' para evitar la extensión de la viruela ovina y caprina
Los expertos aconsejan a los ganaderos extremar las precauciones y mantener limpias las explotaciones. Asaja 'exige medidas sin precedentes para ganaderos'
Continúa la preocupación en la ganadería ovina y caprina ante los nuevos casos de viruela. Ante esta situación, los ganaderos han pedido evitar el sacrificio del ganado y las medidas de vigilancia se han intensificado.
Algo ante lo que Christian Gortázar, investigador del IREC de Castilla-La Mancha, considera "insuficiente". Para la tranquilidad de los ganaderos, asegura que los sacrificios "no son generalizados", sino que las explotaciones vaciadas son las que están siendo afectadas por los brotes de viruela y "las que están presentes en un pequeño radio alrededor de las mismas".
La Consejería de Agricultura ha decidido inmovilizar los movimientos de todo el ganado ovino y caprino en la región, a excepción de Guadalajara.
"La única vía de actuación posible"
Según Gortázar, esta sería "la única vía de actuación posible" para evitar que la viruela que afecta a estos animales se extienda a otras granjas. La restricciones de movimiento, en el caso de los traslados de animales, "sirven y ayudan", pero no son suficientes, "porque la viruela se podría transmitir por otras vías", como residuos contaminados o, incluso, por vectores mecánicos a distancias muy cortas.
"Hay que actuar sobre la bioseguridad", es decir, que además de "aislar y no trasladar a los animales", los ganaderos traten de mantener sus explotaciones en las mejores condiciones posibles, como la correcta limpieza de las instalaciones, por ejemplo.
En definitiva, acciones que limiten al mínimo la probabilidad de que pueda haber una transmisión de estos tipos. Por ello, los expertos aconsejan a los ganaderos extremar las precauciones y mantener limpias las explotaciones.
¿Por qué no hay vacunas?
El problema de las vacunas para los casos de viruela ovina y caprina es que "son atenuadas".
De hecho, en Europa están prohibidas, porque "si se ponen no se puede diferenciar entre los animales que están infectados de lo que están vacunados."
Para la UE, la vacunación no es una opción en la erradicación de los casos de viruela.
12 brotes de viruela ovina en Cuenca
En 1968 fue la última vez que se tuvo constancia de este virus en Europa. Un virus que está presente en todo el norte de África, Asia y oriente medio. "Europa está rodeada de países infectados", por lo que era de esperar que en algún momento se transmitiera también en nuestro país.
Por el momento, se está secuenciando el virus para saber a que variantes se parece y de dónde viene exactamente. "Posiblemente, se haya transmitido en el transporte de un animal vivo ilegal o por la contaminación de uno de estos camiones que transportan a los animales a estas granjas.
Actualmente, hay 25 brotes en España, según el ministerio: 12 de ellos en Cuenca.
A pesar de estos 12 focos en la provincia de Cuenca, el virus afectaría a todas las provincias de Castilla-La Mancha, a excepción de Guadalajara.
Preocupa la gripe aviar
En cuanto a la gripe aviar, "preocupa muchísimo en todo el mundo", especialmente por dos circunstancias que están generando alarma:
- Nunca en la historia de esta enfermedad había habido tantos casos en la fauna silvestre.
- Hay casos en los que el virus se ha transmitido de aves a mamífero y, luego, de mamífero a mamífero. "Hay algún caso en personas, pero muy aislados", asegura.
¿Retirada de la mascarillas del transporte?
Sobre esta cuestión, el experto ha asegurado que "se ha gestionado muy mal el uso de la mascarilla desde su origen".
"Las mascarillas son útiles y para quienes tengan riesgo. Es una cuestión de sentido común. Las personas más susceptibles a la infección del covid-19 deberían ponerse las mascarillas en cualquier ambiente cerrado donde pueda haber concentración de aerosoles", comenta.
Puedes ver la entrevista completa a Christian Gortázar, investigador del IREC de Castilla-La Mancha, a continuación: