TOLEDO
Las piscinas son el lugar donde más lesiones medulares por zambullidas se producen en verano
El Hospital de Parapléjicos de Toledo pide prudencia para evitar lesiones medulares por zambullidas, que afectan a los más jóvenes.
El Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo pide prudencia de los bañistas que este verano acudan a las piscinas o zonas de baño naturales de Castilla-La Mancha para evitar lesiones medulares por las zambullidas inadecuadas.
Desgraciadamente, este tipo de lesiones tienen consecuencias para toda la vida, tanto para los afectados como para su entorno cercano.
Parapléjicos por una mala zambullida
Son muchos los casos conocidos de jóvenes que han quedado parapléjicos por una mala zambullida. Uno de ellos es Jaime, un joven de 26 años, cuya vida cambió por completo hace seis años, cuando sufrió una lesión medular durante unas vacaciones con amigos en Gandía.
Se metió en la playa de noche, y al zambullirse para salvar una ola, se dio un golpe en la cabeza contra la arena. Ahora Jaime quiere usar su voz para concienciarnos de cara a este verano. Por desgracia, la historia de Jaime no es la única.
En el año 2022 ingresaron en el Hospital de Parapléjicos ocho personas con lesión medular traumática causada por zambullida. Las ocho personas afectadas fueron hombres, con edades comprendidas entre los 16 y los 47 años, con un promedio de 24,9 años, según datos facilitados por el centro.
Consejos y recomendaciones
Desde ASPAYM, insisten en recordar que los accidentes que tienen lugar cada verano en estos espacios se producen por un "exceso de confianza", una causa muy habitual en quienes terminan siendo ingresados por las zambullidas.
De hecho, según el director médico del Hospital de Parapléjicos, Antonio Juan, "el 75 por ciento de los pacientes que ingresaron por esta causa se habían lesionado al zambullirse en una piscina, es decir, en un medio aparentemente controlado".
"Son chicos jóvenes que se lesionan en las zonas más seguras".
Hay que cerciorarse de la profundidad de superficie acuática antes de zambullirse y, sobre todo, evitar tirarse de cabeza. Cuando el agua está turbia puede ocultar objetos peligrosos, por lo que se aconseja introducirse en el agua de forma tranquila y sin lanzarse desde demasiada altura.
Y, sobre todo, mucho cuidado con las piscinas, porque aunque son espacios aparentemente controlados, supuso el 75 por ciento de las lesiones medulares del centro en 2022.
Si se produce un accidente por una mala zambulilla, se recomienda que se saque a la persona del agua sin mover la columna y que se espere a que los servicios de emergencias le trasladen a un centro hospitalario.
"Con cabeza sí, de cabeza no"
"Con cabeza sí, de cabeza no" es el nombre de la campaña, con consejos para prevenir consecuencias irreversibles, que el hospital ha puesto en marcha junto con Cruz Roja, la Real Federación Española de Salvamento, la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF) y la Asociación de Parapléjicos y Personas con Gran Discapacidad Física (ASPAYM).