Los peligros del reggaetón: letras sexistas, violentas y pegadizas que triunfan entre los más jóvenes

Daniel Urda Banegas
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Algunos estudios así lo aseguran: escuchar reggaetón puede acarrear problemas, sobre todo, relacionados con la interacción entre hombre-mujer o el consumo de drogas.

Los alumnos de primero de bachillerato de la Escuela de Arte Pedro Almodóvar han analizado algunas letras de este género musical, demostrando que en algunos casos no se trata solo de música.

Entre las opiniones sobre los mensajes que denotan muchas de estas canciones encontramos de todo tipo: quienes aseguran que "es el ritmo, no le prestas atención a la letra", frente a quienes consideran que "la mayoría incita al sexo, las drogas o el alcohol".

"Pueden tener mucha influencia para gente que es pequeña, que no se dan cuenta del impacto que luego estas letras pueden tener sobre ellos", además de ser "una forma de cosificar a la mujer y de tratarnos como si solo sirviéramos para eso", comentan algunos jóvenes.

A pesar de ser conscientes de los mensajes que lanza el reggaetón, ahora mismo, cinco de las 10 primeras canciones del Top 50 España en Spotify pertenecen a este género.

"Agárrala, pégala, azótala (...) siempre me dan lo que quiero, chingan cuando yo les digo", son un claro ejemplo de este tipo de letras, pero ¿Por qué tienen tanto éxito estas canciones?

Los "encantos" del reggaetón

Lo primero que nos atrapa de este género musical es su ritmo pegadizo y contagioso.

Sus letras quedan en un segundo plano, hasta que les prestamos atención. Lo que más importa es el ritmo, que sean canciones bailables y fáciles de recordar.

Sus ritmos incitan al movimiento, tal y como demostró en su tesis doctoral el neurocirujano Jesús Martín-Fernández, del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria de Santa Cruz de Tenerife.

En su estudio demostró que el reggaetón era el estilo musical capaz de activar más áreas del cerebro, como las auditivas o las que procesan el sonido, las motoras y las de movimiento, en comparación con otros géneros como la música clásica, la electrónica o el folk.

Ahí estaría la respuesta al porque este género gusta tanto entre los jóvenes.

[caption id="attachment_113577" align="alignnone" width="670"] Foto de EFE[/caption]

El reguetón y la polémica

Ahora bien, son muchos los cantantes que han sido protagonistas de múltiples polémicas, precisamente, por lanzar en sus canciones mensajes sobre sexo explícito o hacer apología de las drogas o las armas.

En muchas ocasiones se han tenido que enfrentar a la censura de sus propias canciones, catalogadas por el público como misóginas y machistas.

Así ha sucedido con artistas como Maluma, J Balvin o, más recientemente, Tokischa.

"Ser perra está de moda", es uno de los mensajes que se lanza en el último single de la dominicana, "ESTILAZO".

Sus letras explícitas y sus vídeos cargados de referencias sexuales dividen a los que solo ven provocación y los que sienten que es una renovadora de la música latina.

La alta popularidad entre los más jóvenes de este género musical, (son quienes más lo consumen), enciende las alarmas de muchos padres.

El reguetón en la educación

La violencia, la hipersexualización y cosificación de la mujer o el culto al éxito a través del dinero son otros mensajes que se acostumbran a ver en este tipo de canciones.

No es una característica que diste de otros géneros musicales que también triunfan entre los jóvenes, como el Rap, el Hip-Hop o la música urbana, en los que también se reproducen mensajes similares.

Expertos aseguran que es importante identificar los mitos, los estereotipos y los roles de género que se transmiten a través de la música. Algo que se debe hacer a través de la educación.

Así es como lo están haciendo en esta escuela de arte de Ciudad Real: crear conciencia sobre este tipo de mensajes y que los jóvenes sean consientes de qué es lo que están viendo y escuchando cuando reproducen estas canciones.

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