La Fiscalía ha abierto 39 diligencias en residencias durante la pandemia, 11 en la segunda ola
La Fiscalía de Castilla-La Mancha ha abierto 39 diligencias en residencias de mayores de la región desde el inicio de la pandemia de coronavirus, 28 en los tres meses del primer estado de alarma y 11 durante la segunda ola.
Castilla-La Mancha mantiene abiertas 15 diligencias de carácter penal en residencias de ancianos relacionadas con la pandemia. Según el fiscal superior, la situación en estos centros ha mejorado considerablemente entre la primera y segunda ola como demuestra el descenso de fallecidos.
Así lo ha indicado este viernes el fiscal jefe de Castilla-La Mancha, José Martínez, en declaraciones a los periodistas antes de la Junta de Fiscales de la región que se ha celebrado en el Palacio de Justicia de Albacete.
Martínez ha destacado que "la mayoría de ellas están archivadas" y ha añadido que, de las 28 primeras, 10 fueron de residencias de la provincia Albacete, 7 de Ciudad Real, 3 de Cuenca, 3 de Guadalajara y 5 de Toledo.
Ocho diligencias abiertas de la primera ola
Siguen abiertas ocho diligencias, dos de residencias de Albacete, dos en Cuenca, una en Guadalajara y tres en Toledo, y el resto están cerradas porque han entendido los fiscales que "no había argumentos suficientes para seguir", ha puesto de relieve.
Ha destacado que los fiscales han trabajado "muy diligentemente" y que han recibido declaraciones por vía telemática, encargado a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado algunas comprobaciones y también han pedido informes de pruebas médico-forenses.
"Creo que se ha llevado a cabo una investigación exhaustiva porque hemos sido conscientes de la importancia que tenía", ha valorado el fiscal jefe de Castilla-La Mancha.
Las ocho que siguen abiertas, de esa primera ola, ha indicado Martínez que son más complejas y en breve habrá resolución, que puede ser el traslado a los juzgados para abrir proceso penal o el archivo.
Once diligencias en la segunda ola
Sobre las 11 diligencias de la segunda ola ha precisado que llegaron 2 desde Albacete, 1 de Ciudad Real, 2 de Cuenca y 6 de Toledo, y la mayoría siguen abiertas.
Martínez también ha expuesto que, en algunas ocasiones, las denuncias venían de los familiares directamente, pero en otras también la Fiscalía ha actuado a instancias de la Inspección de Trabajo o de algunos organismos públicos.
"En la mayoría de los casos se denunciaban muertes por imprudencia y también faltas de atención o de omisión del deber de socorro", ha explicado.
En la primera ola, Castilla-La Mancha, junto a Madrid, Cataluña y Castilla y León, encabezaba el número de fallecimientos en estos centros.
