Inversión de más de dos millones de euros en Cuenca para la lucha contra incendios

La provincia de Cuenca contará con una nueva base retén de incendios en Uña, en la Serranía conquense, para mejorar el servicio de prevención y extinción de incendios de la región. Forma parte de un plan de mejora de instalaciones en la lucha contra incendios al que, hasta 2020, se van a dedicar doce millones y medio de euros en toda Castilla-La Mancha.

Así lo ha manifestado en una nota la Junta de Comunidades después de que el Consejo de Gobierno haya autorizado a la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (Geacam) un gasto de 355.502 euros para formalizar el contrato de las obras, que podrían comenzar durante la segunda quincena del mes de agosto.

Además, en Cuenca se destinarán más de dos millones de euros en 33 obras para mejorar la lucha contra incendios. La nueva base de Uña es una de las medidas más significativas pero las actuaciones afectarán durante los dos próximos años al conjunto del dispositivo de lucha contra el fuego que cubre todo el territorio conquense.

El gerente de Geacam, Darío Dolz, ha destacado la importancia de esta inversión, "pues va a suponer una mejora sustancial de las instalaciones existentes en la provincia de Cuenca para luchar contra los incendios forestales".

Dolz ha explicado que la nueva base dará cobertura al retén de Uña, compuesto por doce trabajadores y un camión autobomba con otros cuatro componentes, por lo que en las nuevas instalaciones trabajarán hasta dieciséis personas.

Riesgo extremo por incendios forestales

Por otro lado, Dolz ha recordado que la región se encuentra actualmente en periodo de riesgo extremo por incendios forestales debido a la subida de las temperaturas, al tiempo que ha solicitado la colaboración de la ciudadanía para evitar los incendios forestales.

Ha hecho un llamamiento a la prudencia a la hora de salir al monte y ha recordado la prohibición de hacer fuego y arrojar colillas en el medio natural, así como la recomendación de extremar la precaución en la realización de laborales agrícolas con segadoras o cosechadoras.

En el operativo participan medio millar de personas durante el periodo de alto riesgo de incendio, que se prolongará hasta el 30 de septiembre.

La provincia de Cuenca dispone este año de 33 puestos de vigilancia, 10 patrullas móviles con dos componentes por turno para detectar los incendios incipientes, 3 helicópteros de transporte y extinción para el lanzamiento de agua con helibalde y 2 retenes helitransportados en Campillo Paravientos y Albendea.

También un avión de carga en tierra con capacidad de hasta 3.100 litros, 3 máquinas pesadas con alta capacidad de extinción, 13 autobombas y 6 autobombas con retén, un camión nodriza con capacidad para más de 14.000 litros y 13 brigadas terrestres.