Cierra el Palacio del Infantado de Guadalajara por aluminosis
El Palacio del Infantado de Guadalajara cierra por aluminosis. Permanecerá cerrado desde este jueves sus puertas de forma preventiva ante la posibilidad de que parte del edificio esté afectado por aluminosis, para lo que se va a iniciar un estudio que determine su situación.
Así lo han señalado el viceconsejero de Cultura de Castilla-La Mancha, Jesús Carrascosa; el subdirector general de Museos, Miguel González, y el secretario de la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, José María Mediero, acompañados de otros responsables del Ministerio de Cultura en rueda de prensa.
La decisión se ha tomado por un informe remitido a la Viceconsejería de Cultura por parte del Ministerio de Cultura urgiendo a tomar medidas de seguridad ante la posible existencia de patologías en el inmueble descubiertas durante las obras de rehabilitación del pasado verano.
Problemas en la estructura
Mediero ha explicado que en dichas obras se detectó un aspecto "no bueno" de las viguetas de la galería porticada superior que da acceso al jardín y tras un estudio se comprobó que esa zona había sido reformada, en su momento, con cemento aluminoso, propio de construcciones de los años 50 a 70 del siglo pasado.
Este tipo de cemento es muy poroso por lo que ante situaciones de elevada humedad o lluvia lo absorbe provocando la corrosión de hierro en un fenómeno que se denomina carbonatación y provoca la oxidación de las viguetas, en este caso, perdiendo resistencia mecánica.
Tras este primer hallazgo los técnicos trabajaron para concretar qué zonas habían sido rehabilitadas en aquella época pero no encontraron información suficiente lo que han determinado elaborar un informe amplio para valorar, mediante calas en diversos puntos del edificio, su afectación.
Medidas preventivas
Estas recomendaciones y medidas se concretan en limitar el aforo a todas las estancias del museo en una relación de una persona por cada tres metros cuadrados, no modificar las actuales condiciones de distribución de cargas permanentes e impedir la acumulación de cargas puntuales en los forjados.
Mediero ha insistido en que se trata de una medida preventiva y que tras el informe habrá que valorar la envergadura o no de los daños.
No obstante, se prevé un cierre mínimo de cinco meses del monumento teniendo en cuenta los trámites, realización de las calas y elaboración de los resultados, con una media en sendos casos anteriores de dos meses, respectivamente, según los datos indicados por Mediero.
Por su parte, el subdirector general de Museos del Ministerio de Cultura ha destacado el compromiso conjunto de todas las administraciones para solventar la situación de este monumento, algo que es "prioritario" para el Ministerio.