Cambios en la estrategia frente al COVID-19: cuándo se harán pruebas diagnósticas o aislamientos

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Susana Palomo Gómez
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La nueva estrategia frente a la COVID-19 no solo sustituye a la anterior , además tiene novedades como que saca al ámbito educativo al que se trata en la misma consideración que la población general.

En esta nueva estrategia frente al coronavirus hay un "cambio de paradigma en la vigilancia y en la detección de la COVID-19", como ha explicado este jueves el director de Salud Pública de Castilla-La Mancha, Juan Camacho.

Se trata de "seguir las alertas pero normalizar la asistencia sanitaria". Lo que se pretende es lograr "un equilibrio y adaptar las medidas a la realidad de la epidemia y de la sociedad y establecer nuevas pautas".

¿En qué consisten esas nuevas pautas?

Las pruebas diagnósticas a casos sospechosos se realizarán a personas vulnerables (como mayores de 60 años, inmunodeprimidos y embarazadas) y personas que tengan relación con estas personas (sanitarios o trabajadores de residencias) y  en los ingresos por casos graves por COVID o personas procedentes de regiones con nuevas variantes. Además, se deja abierta la posibilidad de que el facultativo médico decida hacer esta prueba.

Deja de ser obligatorio el screening o cribados generales en los ingresos en centros hospitalarios. Aunque cada centro pueden establecer sus propios protocolos.

Desaparecen con carácter general las cuarentenas salvo en los ámbitos vulnerables. "No se trata de hacer desaparecer la vigilancia sino enfocar en las personas vulnerables".

Los aislamientos domiciliarios no se realizarán de forma general a personas con síntomas leves o sin ellos. Sí se "mantienen las recomendaciones lógicas como llevar mascarilla, mantener distancia, evitar aglomeraciones y contacto con personas vulnerables". Estas recomendaciones son también aplicables a casos sospechosos.

Estos aislamientos se mantienen en aquellos casos confirmados de personas ingresadas en hospitales o personas residentes en centros de mayores. En estos casos, el aislamiento será durante cinco días.

Los trabajadores de ámbitos vulnerables no tendrán que hacer aislamiento pero no podrán ir a trabajar hasta que sean negativos en la prueba diagnóstica.

Cambian los indicadores para tomar decisiones. Los más importantes a partir del lunes serán los indicadores de asistencia entre los que se encuentran: tasa de nuevos ingresos, tasa de ocupación por cada cien mil habitantes, tasa de ocupación de camas, incidencia en mayores de 60 años... serán esenciales para tomar decisiones.

De los seis indicadores, Camacho ha asegurado que "Castilla-La Mancha no está mal situada. Después de ocho semanas de bajas interrumpidas, llevamos unos días de cierta estabilidad a los que Camacho achaca a la movilidad entre los carnavales".

Pruebas diagnósticas en casos sospechosos: En cuanto diagnóstico supone el enfoque en las personas vulnerables (como mayores de 60 años, inmunodeprimidos y embarazadas) y personas que tengan relación con estas personas (sanitarios o trabajadores) y los ingresos por casos graves por COVID o personas procedentes de regiones con variantes.

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