"En Azuqueca, nace un niño, nace un árbol" logra plantar 1.700 ejemplares en la localidad guadalajareña
En Azuqueca de Henares (Guadalajara) tienen una saludable costumbre: cada vez que nace un niño en el municipio guadalajareño, plantan un árbol en algún rincón del pueblo. En dos años, llevan más de 1.700 ejemplares plantados. Este domingo ha tocado sembrar moreras en una parcela municipal junto a la autovía. Es la primera plantación de la temporada y esta vez ha tocado en suelo industrial.
Para ello, los hermanos Luca y Clara han tenido que preparar ellos mismos la tierra para plantar su árbol. Luis ya lo ha hecho. Le han ayudado sus padres. Azuqueca de Henares hace un par de años que implantó esta tradición. Los niños del pueblo, cuando son pequeñitos, plantan un árbol junto a sus padres y hermanos. Una actividad que el consistorio puso en marcha con fines medioambientales pero sobre todo para arraigar a estas familias. José Luis Blanco, alcalde del municipio asegura que con esta iniciativa "niños y árboles echan raíces en el pueblo".
Como Luis, como Clara y como Luca, hay otros 150 nacidos en 2018 en el municipio y que desde este domingo tienen un espacio junto al polígono industrial Comendador. En un futuro no muy lejano será un bosque de Moreras.
La temporada pasada se realizaron siete jornadas de plantación en distintas zonas del municipio. Cada familia participante "En Azuqueca, nace un niño, nace un árbol" reciben un 'título de enraizamiento' con los datos de los niños y los ejemplares.
