El asesino de Cristina Martín, de Mora, elude la prisión permanente revisable y es condenado a 23 años de prisión

Susana Palomo Gómez
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Condenado a 23 años de prisión José Rafael García Santana, el asesino de Cristina Martín, que murió el 5 de febrero de 2017 en Mora de Toledo. El magistrado encargado del caso, tras conocerse el veredicto de culpabilidad del jurado ha condenado al marido de Cristina, de 47 años, a 23 años de prisión con lo que evita la prisión permanente revisable.

Esta fue la condena del asesino de Cristina Martín en un primer juicio declarado nulo. En esta ocasión, el Ministerio Fiscal y las acusaciones particulares pedían de nuevo esta pena. El abogado de la defensa, por su parte, solicitaba 6 años por homicidio.

Según ha publicado el ABC Toledo y confirmado CMM,  el magistrado Alejandro Familiar condena a 23 años de prisión a José Rafael por un delito de asesinato, con las circunstancias agravantes de parentesco y de género. También lo inhabilita para ejercer la patria potestad sobre su hija, menor de edad.

¿Qué argumenta el juez?

Al parecer, no procede la prisión permanente revisable solicitada por el ministerio fiscal y las acusaciones por el principio non bis in ídem. Eso significa que un hecho no puede ser sancionado más de una vez y al haberse considerado el delito de asesinato con alevosía, que implica la indefensión de la víctima, no puede volver a tenerse en cuenta su especial vulnerabilidad

Decepción en la familia de Crisina

La familia de Cristina Martín se siente decepcionada, pedían la máxima condena y están valorando recurrir la sentencia.

Hace poco más de una semana, un jurado popular declaraba a José Rafael culpable del crimen machista de Cristina Martín. El veredicto fue unánime aunque algunas de los preguntas de las que constaba el objeto del veredicto no consiguieron el consenso, como la relativa a si la víctima tuvo posibilidad o no de huir de su agresor, pese a sus graves problemas de movilidad, equilibrio y dolor crónico, o si tenía miedo de que su marido la pudiera matar.

El jurado consideró que Cristina no pudo huir ni defenderse. Sin embargo, el tribunal popular que emitió su veredicto el pasado 14 de septiembre no apreció esas agravantes.

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