El Baile del Zángano, en Pozohondo, aspira a ser declarado Fiesta de Interés Turístico Regional

Los danzantes de Pozohondo, en Albacete, han vuelto a interpretar, un año más, la Danza del Zángano. Se trata de una marcha fúnebre sobre la muerte de San Juan Bautista que se celebra cada noche de San Juan, patrón de la localidad. 

Las castañuelas, el tambor y las dulzainas ponen música para que los zánganos representen cómo se amortaja a San Juan, el triste final de la historia de amor y celos entre Herodes, Salomé y el Santo. "Salomé estaba enamorado de San Juan y Herodes, de la hija de Salomé. De eso se trata esta danza"

Una danza que data del siglo XVIII

Esta danza fúnebre es una tradición de mitad del siglo XVIII, y recuperada a principios del siglo XXI, que ahora aspira a conseguir la declaración de Interés Turístico Regional. "Estamos intentando empezar con el expediente de declaración de Interés Turístico Regional, porque esta danza, que es autóctona, solamente se baila en esta población", explica Julia Sánchez, alcaldesa de la localidad. 

Vecinos de todas las edades participan en este baile, que se ha convertido ya en una tradición c0n mucho futuro: "Se nos ponen los pelos de punta".

Además, este año los danzantes han estrenado trajes: "Tenemos antiguos y se ha intentado buscar que sea el dibujo sea parecido", cuenta José Luis González, uno de los danzante que interpreta el baile.