Trump condena a los grupos neonazis 2 días después de los sucesos de Virginia

Donald Trump ha vuelto a la Casa Blanca sólo por unas horas y con un objetivo claro, dar la cara tras el aluvión de críticas que le han llegado de todos los rincones del país, incluido su propio partido, por no haber condenado de forma explícita la violencia de los supremacistas blancos en Charlottesville, Virginia. El presidente que ha comenzado hablando de su logros en materia económica y no ha aceptado preguntas, ha dicho que el racismo no tiene hueco en Estados Unidos.

Mientras, algunos supremacistas se han congregado a las puertas del juzgado donde ha comparecido por videoconferencia, el autor del atropello que le costó la vida a una mujer de 32 años y dejó una treintena de heridos.

Indignados, han  acusado a los medios de mentir y han responsabilizado a los grupos de izquierda de los enfrentamientos del fin de semana: "Ellos son los responsables de la violencia. Ellos gritaban asesinar a los nazis y fascistas. Ellos estaban preparados para la guerra e intentaron matarnos", aseguran.

Alex Fiels Jr , de 20 años, ha sido acusado de homicidio en segundo grado y tentativa para hacer daño a otras personas. El juez le ha negado la libertad bajo fianza.