Escape de gas en una planta química de Texas inundada por el huracán Harvey
En un principio se había hablado de dos explosiones, que habrían sacudido una planta química cercana a Houston, Texas, la zona más afectada hasta el momento por el paso del huracán Harvey. Las autoridades locales aseguran ahora que puede haberse tratado de un escape, sin que se haya producido ninguna explosión, aunque sí un pequeño incendio, y que los gases expulsados a la atmósfera desde las instalaciones de Arkema, en Crosby, cerca de la ciudad de Houston, pueden causar algún tipo de irritación aunque, en principio, no serían tóxicos.
La planta había quedado inundada tras el paso de la fuerte tormenta. De este modo, la gran cantidad de agua unida a la falta de electricidad han impedido que se actuara para intentar prevenir lo ocurrido. Como medida preventiva, las autoridades locales han decretado la orden de evacuación en un radio de casi 2 kilómetros alrededor de la factoría, sobre todo, porque hay productos almacenados en varios lugares del establecimiento y porque se mantiene la amenaza de que se pudieran producir explosiones o un nuevo incendio.
Un agente de policía que se encontraba cerca en el momento del escape ha sido hospitalizado y otros nueve se han encontrado en el centro médico para ser analizados tras inhalar el humo.
El domingo pasado, las fuertes lluvias de Harvey provocaron un apagón en la planta que afectó a los generadores de reserva. Desde ese momento, las instalaciones se quedaron sin sistema de refrigeración para productos químicos, lo que puede aumentar el riesgo de volatilidad a medida que sube la temperatura en el exterior.
Mientras, la cifra de víctimas mortales por la tormenta se eleva a 35 y, cuando, el agua sigue subiendo, preocupan a día de hoy varios embalses, que se encuentran en el área de Texas y la frontera con Luisiana, y que podrían desbordarse en cualquier momento.