EE.UU. aboga por que se voten en la ONU nuevas sanciones contra Corea del Norte

Se trabaja ya en un borrador de resolución encaminado a lo que propone la Casa Blanca: que se voten en la ONU nuevas sanciones contra Corea del Norte tras su última prueba anunciada, al parecer, la de una bomba de hidrógeno.

Washington busca más sanciones y más duras, que asfixien económicamente al régimen de Pyongyang, aunque aún no se sabe qué incluirá el texto, porque se negocia en estos momentos entre los 15 miembros del Consejo de Seguridad, tras la que es ya su reunión número 10 en respuesta a Corea del Norte. No obstante, EE.UU. pretende que la resolución se vote en la ONU el lunes próximo.

Lo que sí ha manifestado la administración estadounidense es que considera que los países que mantienen relaciones comerciales con Pyongyang colaboran, en cierto modo, en el mantenimiento de su programa y sus ambiciones nucleares. Y Washington ha asegurado que suspenderá su comercio con cualquier país que lo mantenga con el gobierno de Kim Jong Un.

Afirmación que induce a pensar que la Casa Blanca busca intimidar veladamente a estos países. El principal es China, con diferencia, el mayor cliente y proveedor de Corea del Norte. No obstante, se prevé difícil imaginar cómo podría Estados Unidos "castigar" a China sin perjudicar a su propia economía, ya que es su principal socio comercial.

Este último ensayo nuclear norcoreano, el sexto ya, ha hecho saltar todas las alarmas, al tratarse, al parecer, de una bomba potente bomba de hidrógeno. Tanto es así que hasta China, su principal valedor hasta hace no demasiado tiempo, empieza a mostrar su hartazgo con respecto a Kim Jong Un.

Pekín ha endurecido su discurso y, aunque aboga claramente por una solución diplomática a la crisis, ahora, no excluye la posibilidad de apoyar en la ONU un embargo total de petróleo al régimen norcoreano, como represalia al ensayo nuclear de este domingo, que el Gobierno chino ha condenado "enérgicamente".

Mientras, Estados Unidos y Corea del Sur planean desplegar un portaaviones nuclear, varios bombarderos y otros efectivos estratégicos en la península coreana.