Diario del coronavirus, 30 de septiembre: La Habana flexibiliza medidas dentro de una reapertura gradual

Las autoridades de La Habana anunciaron la flexibilización a partir de este jueves de algunas medidas restrictivas establecidas por la covid-19 en las áreas de recreo y deportes debido a que la capital cubana reporta desde hace ocho semanas una baja sostenida en los contagios de esa enfermedad.

El Gobernador de la ciudad, Reinaldo García Zapata, informó que desde hoy los habaneros podrán realizar ejercicios físicos en la vía pública y en los gimnasios, así como reunirse en el emblemático Malecón y disfrutar de las playas y las piscinas, según cita el periódico digital Tribuna de La Habana.

Este anuncio que relaja ciertas disposiciones se suma a la reanudación de los servicios gastronómicos, de notarías y registros civiles y de la propiedad puesta en marcha desde el pasado 24 de septiembre, cuando la restricción de movimiento en la ciudad se fijó desde las 10:30 de la noche, una hora y media más tarde que hasta el momento.

Desde entonces comenzaron a reabrir sus puertas 533 establecimientos de la gastronomía estatal y privada, entre ellos 315 restaurantes, 95 cafeterías, 14 pizzerías y la céntrica heladería Coppelia.

García Zapata señaló en ese momento que tras año y medio de pandemia es necesario reactivar la vida económica y social y, para decidir la reapertura, se ha evaluado la situación sanitaria de La Habana, donde se ha visto una evolución favorable a partir de que las infecciones bajaron de unas 1.900 diarias a 450 como promedio.

La reapertura de los gimnasios incluye aquellos cuyos locales están climatizados, pero en su caso deberán cumplir estrictamente con protocolos sanitarios como el distanciamiento físico y la desinfección de los equipos cada vez que los utilice una persona, lo cual será chequeado por un cuerpo de inspección y control.

En las piscinas se permitirá un aforo al 50 por ciento de su capacidad y tanto en esos espacios recreativos como en las playas es obligatorio el uso de la mascarilla, excepto cuando los bañistas se internen en el mar, según advirtieron las autoridades de la ciudad capital.

Además especificaron que no hay condiciones para asegurar un servicio gastronómico adecuado en los balnearios públicos habaneros por lo que quienes acudan a ellos deben garantizar por su cuenta los productos alimenticios.

Para las visitas a las playas y a las áreas del Malecón, donde muchos acuden a pescar o a disfrutar del paisaje marino, también se exigirá el cumplimiento de las medidas sanitarias recomendadas para prevenir infecciones.

La decisión de flexibilizar las restricciones que han estado vigentes durante año y medio de pandemia responde a que en las últimas ocho semanas se ha mantenido una reducción de los casos confirmados con la covid-19,

La Habana -donde viven 2,2 millones de personas- confirmó hoy 376 nuevos pacientes de la enfermedad.

Las autoridades consideran que la baja de la curva de contagios está relacionada con el avance de la campaña de vacunación masiva que se ha aplicado en la ciudad, también extendida al resto de la isla.

En este nuevo paso hacia la nueva normalidad también transitan otras seis provincias (Matanzas, Mayabeque, Cienfuegos, Ciego de Ávila, Santiago de Cuba y Guantánamo) y el municipio especial Isla de la Juventud, que han comenzado a flexibilizar gradualmente las medidas impuestas por la covid-19.

Esta desescalada en regiones del país que han mejorado su situación epidemiológica se vincula con la anunciada reapertura de las fronteras de Cuba al turismo internacional desde el próximo 15 de noviembre. EFE