El caos en Venezuela desata una crisis humanitaria sin precedentes en Sudamérica
En Venezuela, una nueva moneda
Venezuela estrena este lunes el bolívar soberano, la nueva moneda nacional que sustituye al llamado bolívar fuerte, para intentar frenar una inflación que, según cálculos del Fondo Monetario Internacional (FMI), cerrará 2018 con una cifra récord de un millón por ciento. Maduro anunció el pasado mes de julio que a partir de este 20 de agosto el bolívar fuerte perdería cinco ceros para convertirse en el bolívar soberano, en la segunda reconversión monetaria que acomete Venezuela en una década. Los principales bancos del país han comenzado a dispensar los nuevos billetes, que convivirán con los antiguos durante un tiempo aún indeterminado para facilitar la transición.
La nueva moneda nacional forma parte de un paquete de medidas con las que el Gobierno pretende enderezar el rumbo económico después de cinco años de crisis en los que la falta de liquidez ha disparado el precio de los pocos productos disponibles. "Esto se salió de control. Los precios están por las nubes", ha dicho a Reuters Betzabeth Linares, un ama de casa de 47 años tras intentar comprar una caja de manzanilla.
Maduro también anunció durante el pasado fin de semana que a partir del 1 de septiembre reduciría el precio de los combustibles y subiría el salario mínimo. Críticos y economistas dudan de la eficacia del plan de Maduro, vaticinando que el Gobierno no podrá pagar el sueldo de los empleados públicos, que ahora será 60 veces mayor.
Además, aunque Maduro llamó a no subir los precios, estos comenzaron a dispararse desde el viernes cuando decretó que el salario mínimo se multiplicará por 35 desde el 1 de septiembre. Productos como la gasolina, cuyo precio solía ser muy bajo han experimentado un aumento de facto este lunes pues los billetes con que se pagaban estos combustibles son de circulación ilegal desde hoy.
Además, el jefe de Estado prometió unificar el mercado cambiario, que es controlado por el Estado y donde se estima que podría incrementarse esta semana en 2.311 % el precio del dólar estadounidense, lo que significaría una devaluación del 95,8.
Frontera con Brasil
El ministro de Seguridad Institucional de la Presidencia de Brasil, Sergio Etchegoyen, afirmó hoy que un cierre de la frontera con Venezuela tras los incidentes ocurridos durante el fin de semana es "impensable" y sería "ilegal". Etchegoyen contestó así a una nueva acción de las autoridades del estado fronterizo de Roraima, puerta de entrada de los venezolanos a Brasil, que han vuelto a pedir al Supremo que interrumpa el ingreso de ciudadanos del país vecino tras el ataque a un campamento de inmigrantes el pasado sábado por ciudadanos brasileños.
Este sábado, un comerciante de Pacaraima fue agredido por un grupo de venezolanos, lo que llevó a decenas de ciudadanos brasileños a atacar e incendiar un pequeño campamento de ciudadanos del vecino país. El Gobierno ha decidido desplazar a Pacaraima a 120 agentes de la Fuerza Nacional de Seguridad, formada por personal de la Policía Federal, para garantizar el orden en esa ciudad.
Frontera con Ecuador
El pasado sábado entró en vigor la exigencia de pasaporte para los ciudadanos venezolanos, una medida anunciada por sorpresa por el Gobierno ecuatoriano el jueves pasado. La medida entró en vigor mientras decenas de venezolanos estaban en tránsito por Colombia, por lo que se enteraron al llegar al punto de migración.
En la zona de Rumichaca hubo varias protestas y escenas de angustia el fin de semana ante la incertidumbre en la que quedaron varios venezolanos varados que querían cruzar Ecuador para llegar a Perú, donde muchos de ellos prevén reencontrarse con su familia. El Gobierno peruano ha anunciado que exigirá pasaporte a partir del próximo 25 de agosto. El ministro ecuatoriano del Interior, Mauro Toscanini, ha defendido la medida para "garantizar el ingreso seguro, regular y ordenado" y para evitar casos de trata de personas y tráfico de migrantes.
AGENCIAS