Miles de personas se manifiestan en varias ciudades españolas contra los recortes en pensiones

Miles de personas se han manifestado este sábado en varias ciudades españolas en defensa del sistema público de las pensiones y para protestar también contra los recortes que dicen prepara el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.

En Madrid, alrededor de un millar de personas, según los convocantes, se han reunido en una manifestación que ha transcurrido entre la Puerta del Sol y el Congreso de los Diputados y en la que, a lo lardo de dos horas, han coreado consignas contra el Gobierno y han expuesto sus principios, como recogía su pancarta de cabecera: "En defensa del sistema público de pensiones. No al Pacto de Toledo".

Tres personas en silla de ruedas motorizadas comandaban la marcha, en la que también participaban gente de las denominadas "mareas" y que no cesaban de reclamar su oposición a la privatización de las pensiones públicas y la equiparación de éstas al salario mínimo.

En Barcelona, otro millar de personas, según la Guardia Urbana, se ha concentrado este mediodía ante la sede de la Delegación del Gobierno en Cataluña, en defensa del sistema público de las pensiones.

El acto, convocado por la Marea Pensionista de Cataluña, ha arrancado en la plaza Urquinaona de la capital catalana con el lema "En defensa del sistema público de pensiones. Ni recortes ni privatizaciones", y se ha transformado en una manifestación que ha discurrido pacíficamente por las principales calles de la ciudad hasta la sede de la Delegación del Gobierno.

Ramon Franquesa, portavoz de la Marea, ha informado a EFE de que los manifestantes han reclamado que se mantenga el carácter público de las pensiones y que ningún acuerdo sobre esa retribución implique su privatización.

Franquesa ha explicado que los manifestantes han reivindicado que se aclare si el acuerdo alcanzado esta semana entre el Gobierno y los agentes sociales, adelantado ayer por el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, implica la privatización de las pensiones, una posibilidad que permite el vigente "Pacto de Toledo", denominación con la que se conoce desde 1995 la actual aplicación del sistema. "No queremos que se creen fondos privados de pensiones ni con este ni con ningún otro acuerdo", ha incidido Franquesa, quien ha pedido también que el Tribunal de Cuentas audite la tesorería de la Seguridad Social desde su creación, en 1963.

Y miles de pensionistas se han manifestado también en las tres capitales vascas, Pamplona y varios municipios del País Vasco y Navarra convocados por el Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria.

La mayor de las marchas ha sido la de Bilbao, donde han participado varios miles de personas, la gran mayoría pensionistas pero también sindicalistas, miembros de colectivos sociales y trabajadores de empresas en crisis.

Además de en la capital vizcaína también se han realizado manifestaciones por la tarde en Vitoria, San Sebastián y Pamplona, mientras que por la mañana se han realizado en localidades como Ondarroa, Lekeitio, Eibar o Alsasua. La manifestación de Bilbao ha estado encabezada por una pancarta que reclamaba "Pensiones dignas 1080 euros/mes" y un organismo propio de Seguridad Social.

Durante las marchas se han coreado lemas ya "clásicos" del movimiento de pensionistas tras más de tres años de movilizaciones semanales como "gobierne quien gobierne, las pensiones de defienden", "no desgravaciones a planes de pensiones", "pensión privatizada, pensión robada" o "lo público no se vende, lo público se defiende".

El portavoz del Movimiento de Pensionistas de Bizkaia, Jon Fano, ha criticado duramente, en declaraciones a la prensa, a los sindicatos UGT y Comisiones Obreras por negociar con el Gobierno de España y las patronales CEOE y Cepyme la reforma de las pensiones.

En su opinión, "el Gobierno con las patronales, UGT y Comisiones van a cerrar pronto acuerdos sobre las pensiones que supondrán recortes importantes, no tanto para los ya pensionistas como para las futuras generaciones".

EFE