La embarazada hospitalizada por orden judicial da a luz por cesárea en Asturias
La mujer embarazada que había superado las 42 semanas de gestación e ingresó por orden judicial en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) el pasado miércoles para evitar que pariera en casa, como era su voluntad, ha dado a luz esta madrugada tras practicarle los facultativos una cesárea.
El parto tuvo lugar pasadas las dos de la mañana y tanto la madre como la hija se encuentran "bien", según han indicado a Efe fuentes de su entorno.
La mujer que superaba las 42 semanas de gestación fue hospitalizada por orden judicial en Oviedo se ha visto privada de su derecho a decidir si quería asumir los riesgos de la inducción al parto, según denuncia la Asociación El Parto es Nuestro y del Observatorio de la Violencia Obstétrica.
Recibimos con preocupación la noticia de una mujer a la que se han llevado por la fuerza a parir al hospital por orden judicial. Escasean los datos. Desde PETRA defendemos los derechos de las #mujeres a un embarazo y parto sin #violenciaobstétrica. https://t.co/iKEf8d2NuF
La abogada de la asociación, Francisca Fernández Guillén, ha asegurado a EFE que el médico se ha arrogado el poder de decisión y ha utilizado a la judicatura porque ha dibujado un cuadro de sufrimiento letal y riesgo de muerte que no se correspondía con la realidad.
La abogada ha rechazado que hubiera un riesgo de muerte del bebé y ha explicado que no se ha tenido en cuenta la opinión de la madre. Fernández Guillén ha relatado que la mujer fue voluntariamente ayer hasta el Hospital Universitario Central de Asturias, y, tras la monitorizaron, los médicos la aconsejaron la inducción.
La policía fue buscarla a su casa tras la decisión del juez
Seguidamente, ella se fue a dar un paseo con su marido "a respirar" y, cuando volvió, estaba cerrada la zona de partos y "como no había una urgencia", ha señalado, se fue a su casa y pocas horas después llegó la Policía.
La letrada se ha quejado de que la jueza no investigara los hechos y acordara el ingreso en el Huca sólo con la versión del jefe de Obstetricia y Ginecología del hospital. Su solicitud llevó a que el Juzgado de Instrucción número 1 de Oviedo dictase un auto con el la policía local se presentó en el domicilio de la mujer embarazada para cumplir con el mandamiento judicial e ingresar a la mujer en el centro hospitalario.
Fernández Guillén ha manifestado que a la mujer no se le ha tomado declaración, ni se le ha dado oportunidad a que se defendiera, sin ofrecerle otra alternativa que la inducción al parto.
Tras hacerse público el caso, una decena de partidarios de los partos en casa se han concentrado con pancartas a la puerta del centro hospitalario para reivindicar ese derecho y exigir que a la mujer se le permita tomar su decisión con libertad