UGT pide que se mejora la seguridad y prevención para atender a menores en Castilla-La Mancha

Tras el asesinato de una trabajadora social en Badajoz, el sindicato UGT pide que se mejore la seguridad en los centros de menores. Este viernes se van a concentrar frente a las delegaciones de Bienestar Social de todas las provincias de Castilla-La Mancha.

Denuncian que solo hay un trabajador por turno y piden que se aumente a dos personas. Además exigen una revisión de cada centro de trabajo para evaluar las condiciones laborales y de seguridad con el fin de que se preste un servicio público y de calidad.

En una rueda de prensa, las representantes del sector autonómico de UGT Servicios Públicos Estrella Fernández y Rosario Madrigal han planteado la necesidad de hacer este análisis, para evitar que puedan producirse situaciones como la muerte de una educadora en un piso tutelado de Badajoz.

Fernández y Madrigal han comentado que en la región hay pisos tutelados en los que hay un solo cuidador para diez o más menores, por lo que es necesario que se revise la situación de todos los centros en los que hay menores o adolescentes, aunque algunos si tienen personal de apoyo como vigilantes de seguridad o psicólogos.

Sin embargo, que en un centro haya una sola persona para cuidar a nueve, diez o más niños o adolescentes "no cumple las condiciones de seguridad que se requieren, por lo que sería conveniente revisar la situación en la que se encuentran estos recursos", en buena parte gestionados por fundaciones, asociaciones y entidades del Tercer Sector, pero bajo la tutela de la Junta de Comunidades.

Análisis de la realidad de cada centro 

Por ello, han reclamado al Gobierno regional que se haga un análisis de la realidad de cada centro, que se revise y se repiense el modelo de gestión que ahora está externalizado, que se evalúen las condiciones laborales y de seguridad, con el fin de que cuidadores y educadores puedan trabajar en un entorno seguro y se ofrezca un servicio público de calidad.

Según Fernández y Madrigal, sería necesario que hubiera un protocolo de ámbito nacional, no como ocurre actualmente que hay "reinos de taifas" con un protocolo en cada comunidad, pero en el caso concreto de Castilla-La Mancha habría que tomar medidas porque situaciones como la que se han producido en Badajoz son sólo "la punta del iceberg" sobre las necesidades existentes.

En este sentido, han señalado que según datos de la Junta de Comunidades en Castilla-La Mancha las necesidades relacionadas con centros de atención a menores y adolescentes crecieron un 36 % en 2024 con respecto a las que había en 2023, que a su vez habían crecido un 14 % en relación con las del año anterior.