FAUNA
Liberan cinco ejemplares de aves rapaces recuperados en el CERI de Sevilleja de la Jara (Toledo)
Habían ingresado en el CERI por distintas causas: pegamento, disparo, traumatismo y electrocución.
Suelta de aves rapaces recuperadas. Búho real.
Cinco aves rapaces: un búho real, dos halcones peregrinos, una lechuza y un cárabo regresan a su medio natural. Las han soltado en Navahermosa, Toledo, y han sido recuperadas todas en el Centro de Estudios de Rapaces Ibérico (CERI) de Sevilleja de la Jara.
Alumnos de tres institutos de la provincia han sido testigos de la liberación de estos animales.
La directora general de Medio Natural y Biodiversidad, Susana Jara, ha explicado que los ejemplares ingresaron en el CERI por distintas causas (pegamento, disparo, traumatismo y electrocución) y han sido objeto "de un gran trabajo de recuperación por parte de veterinarios y técnicos, para ganar musculación y perfeccionar sus habilidades antes de ser devueltos al medio natural".
En este contexto, Jara ha explicado que "este centro dedica su mayor esfuerzo al tratamiento de las aves rapaces. Así en 2003 fue el primero del mundo donde se reprodujo en cautividad el águila perdicera, en 2006 el segundo a nivel mundial en reproducir el águila real, en 2007 el primero en conseguir reproducir el halcón de Eleonor y en 2011 y 2024 en reproducir en cautividad el águila imperial".
"El CERI es el centro de recuperación de fauna salvaje que ha registrado más entradas totales, unas 1.350 del total de 5.000 que ha habido entre todos los centros de la región", ha señalado la directora general.
El grupo faunístico que atiende de forma más frecuente es el de las aves no rapaces con un 46,1 %, al que sigue el grupo de aves rapaces con un 42 % así como mamíferos, anfibios y reptiles. Y sus principales causas de ingreso son: traumatismos, electrocuciones e intoxicaciones, entre otras.
Tendidos eléctricos
El CERI es uno de los centros de referencia forense a efectos de la determinación de muertes por causas no naturales de especies amenazadas, principalmente la lucha contra el uso ilegal del veneno en el medio natural y la electrocución, a través de la aplicación de protocolos forenses. "La electrocución es la principal causa de mortalidad no natural de avifauna y es la causa de la mayor entrada de ejemplares", ha señalado la directora general de Medio Natural y Biodiversidad.
Castilla-La Mancha es una zona de paso de grandes aves migratorias y ostenta un medio natural de monte mediterráneo en muy buen estado de conservación en el que encuentran su hábitat la mayor parte los grandes rapaces. "Tenemos una especial responsabilidad en su conservación y se han conseguido hitos tan importantes como haber logrado duplicar la población de águila imperial en los últimos cinco años, comprendiendo la mitad de la población mundial de la especie".
Susana Jara ha querido agradecer la colaboración fundamental del cuerpo de Agentes Medio Ambientales, también de la Guardia Civil, Policía Local y la ciudadanía en general que nos dan avisos cuando encuentran especies en el medio natural "y gracias a los cuales se puede llegar a este final exitoso que no siempre es posible".
Europa Press/JCCM/CMM