Liberadas 32 víctimas de trata, algunas explotadas sexualmente en viviendas de la provincia de Toledo

32 víctimas de trata han sido liberadas en una operación en la que también han desarticulado una organización criminal dedicada a la explotación sexual de mujeres, algunas de ellas en la provincia de Toledo, así como en Madrid y Málaga. 

Hasta 26 personas pertenecientes a la organización han sido detenidas, 12 en Toledo, 9 en Madrid y 5 en Málaga, entre los que se encuentran los dos cabecillas de la organización que han sido ingresados en prisión provisional, según ha informado la Policía Nacional en nota de prensa. Estos sometían a las mujeres a una gran vigilancia, haciendo que estuvieran disponibles las 24 horas del día y sometiéndolas a estrictas normas. 

Esta investigación se inició en junio del año pasado cuando una de las víctimas alertó de la existencia de esta red criminal, especializada en la captación de mujeres en situación de vulnerabilidad para después explotarlas sexualmente en viviendas ubicadas en las provincias de Toledo, Madrid y Málaga.

Hasta 600 víctimas explotadas en el último año

Los agentes intervinieron numerosos contratos laborales firmados por las víctimas, que ha llevado a los investigadores a hacer una estimación de cerca de 600 víctimas explotadas en el último año en las cuatro casas con las que contaba la red y que actualmente se encuentran clausurados. 

En su mayoría, las mujeres captadas eran de origen colombiano y venezolano, que atravesaban situaciones personas y económicas complicadas. De esta forma de aprovechaban de su vulnerabilidad y, a través de otros contactos ubicados en sus países de origen, establecían las "mamis" o encargadas de las casas. 

A las víctimas les prometían unas ganancias de 5.000 euros a la semana, con unas buenas condiciones de trabajo y con habitación propia para descansar, contrayendo una deuda de entre 3.000 y 4.000 euros con la organización.

Disponibles las 24 horas y cesión de derechos de imagen

Debían estar disponibles las 24 horas del día, todos los días de la semana, teniendo que estar siempre arregladas. Además, tenían prohibido engordar y si lo hacían, eran expulsadas de la casa. En el caso de no cumplir con las estrictas normas, les imponían sanciones económicas de entre 30 y 40 euros. 

En una de las cláusulas del contrato que debían firman, las víctimas cedían sus derechos de imagen, para que apareciera publicada en varios portales web con contenidos para adultos.  

Las condiciones en las que vivían las víctimas eran de total insalubridad, se encontraban hacinadas en una misma habitación, generalmente en los sótanos de las casas, con las camas separadas por cortinas y con poca ventilación y eran vigiladas a través de las múltiples cámaras colocadas en las estancias. Además, tenían la obligación de ofrecer a sus clientes diversas sustancias estupefacientes como cocaína, tusi y cristal.

Durante los registros realizados por la Policía Nacional, intervinieron 40.000 euros en efectivo, un arma de fuego real con munición, diversas sustancias estupefacientes (cocaína, marihuana, hachís y tusi), 500 pastillas de tratamiento para la disfunción erectil, tres vehículos, diversos dispositivos electrónicos y numerosa documentación relevante para la investigación.

La Policía Nacional cuenta con la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial de este tipo de delitos, no quedando reflejada la llamada en la factura telefónica.