TRIBUNALES
El amigo del joven asesinado en el Polígono de Toledo declara que el acusado se ensañó con la víctima
En la segunda sesión del juicio también ha declarado la exnovia del acusado que ha destacado su carácter agresivo ante cualquier discusión

Acusado de apuñalar hasta la muerte con un puñal de grandes dimensiones a otro joven.
Segunda jornada del juicio contra el hombre acusado de asesinar a machetazos a otro en el barrio del Polígono, en marzo de 2023. En la sesión de este martes han declarado los testigos, entre ellos: el amigo que lo acompañaba esa noche y que presenció todo los hechos.
El amigo se ha derrumbado en varios momentos de la declaración y es uno de los testigos claves en este juicio. Ha contado cómo el acusado se ensañó con la víctima asestándole las 12 puñaladas con un machete. Lo apuñaló a gran velocidad, con una rapidez que no ha visto "ni en pesadillas".
Sin embargo, el testigo ha relatado que no eran amigos del acusado sino conocidos del barrio y que ese fin de semana, cuando ocurrieron los hechos, no es que hubieran quedado para ir a tomar unas copas sino que se encontraron en un local y el procesado se fue con ellos.
Antes de entrar en el último local, ha contado, víctima y acusado tuvieron un "roce" en el que el primero le dio "un tortazo o manotazo" al segundo, sin conocer el motivo, pero se disculparon y luego se comportaron con normalidad hasta el momento de los hechos; pero el testigo ha considerado que en ese momento el procesado se sintió "humillado", que se lo guardó toda la noche y que por eso le atacó después.
Entre las personas que han testificado en esta segunda sesión del juicio, se encuentra también una vecina del acusado que había sido su novia y a la que, según ha contado, el acusado le dejó por debajo de su puerta una nota en la que se identificaba, le pedía que llamase a su hermano porque la había "liado" y se iba "preso".
En este momento, ha asegurado, no tuvo "ninguna duda" de que su vecino y exnovio estaba implicado en la muerte de una persona en la madrugada, por lo datos que contenía la nota y porque lo conoce por sus años de relación sentimental y sabe que es una persona "agresiva y vengativa" y que era aficionado a las armas blancas e incluso alguna le había sido requisada
También ha declarado la expareja del acusado que reside en el mismo edificio y ha reconocido que el acusado le dejó una nota cuando ocurrió el crimen reconociendo "que la había liado". Su expareja ha destacado su carácter agresivo ante cualquier discusión.
Los policías que participaron en la detención ya que el propio acusado se entregó a las pocas horas de cometer el presunto asesinato.
El registro de su vivienda para intentar localizar el arma del crimen desembocó en graves disturbios que acabaron con varios detenidos y un agente herido.
La Fiscalía pide 23 años de cárcel, para la acusación particular hubo ensañamiento y alevosía y reclama 25 años de prisión, mientras que la defensa hay duda de su autoría y pide la libre absolución del acusado.