TOLEDO

Helados artesanos, la solución de las monjas del Convento de San Antonio de Padua

Las monjas se han tenido que reinventar debido a la baja de demanda de dulces y mazapán en verano

TOLEDO, 07/08/2024.- Las monjas del convento de San Antonio de Padua, en Toledo. EFE/Ángeles VisdómineEFE

Paula Corchado Pérez
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Las monjas del Convento de San Antonio de Padua, en Toledo, han tenido que reinventarse. La bajada de la demanda de dulces y mazapanes durante el verano ha hecho que descubran el mundo del helado artesanal.

Las ocho monjas que residen en el convento son las encargadas de hacer los dulces y los helados, además de llevar a cabo las tareas del convento.

Sor Matilde, una de las monjas, ha contado que hace un año buscaron nuevas alternativas para la temporada estival y las monjas de Gandía fueron las que les enseñaron el arte de los helados.

La producción es limitada ya que son ellas mismas las que realizan todo el proceso. Sin embargo, ofrecen helados de distintos sabores como mazapán, leche merengada, mascarpone o limón.

Sor Matilde ha añadido que "lo que a mí más me queda es la alegría de la gente, la satisfacción cuando dicen qué ricos están". Esta actividad no solo les ha servido como una fuente de ingresos sino como una forma de conectar con el público.

Estos deliciosos helados artesanales se encuentran en la tienda del convento, ubicada en la céntrica calle de Santo Tomé, en el Casco Histórico de Toledo.