Estas son las diferencias entre tener alergia a la proteína de la leche y ser intolerante a la lactosa

Ser intolerante a la lactosa no es lo mismo que ser alérgico a la Proteína de la Leche de Vaca. La joven adolescente de Manzanares que ha fallecido era alérgica a la proteína de la leche de vaca. Su caso nos ha hecho comprender y aclarar con un especialista las diferencias entre una intolerancia y la alergia porque son dos trastornos distintos pero a menudo tienden a confundirse.

¿Qué implica ser alérgico a la PLV?

Una persona tiene alergia a las proteínas de leche de vaca cuando su sistema inmunológico rechaza la ingesta de productos que contienen esta proteína, principalmente leche. Suele detectarse en la infancia y afecta a un 2,5 por ciento de la población.

El doctor Ángel del Moral explica a CMM que ante cualquier reacción alérgica lo más importante es llevar encima adrenalina para suministrarla al instante y trasladar al afectado a un centro de salud.

Frecuentemente se ponen de manifiesto los síntomas en el primer contacto aparente con la leche, como la introducción de biberón.  Además de por ingestión, la leche puede producir síntomas por contacto cutáneo directo o indirecto besos, roces, vómitos y también síntomas respiratorios por inhalación. 

En ocasiones, los síntomas son leves y poco valorados o no relacionados aparentemente con el alimento. Destacan los síntomas digestivos aunque puede haber también síntomas cutáneos y respiratorios . 

En cuanto a cantidades, nos cuenta, cada cuerpo es un mundo. Una persona muy alérgica sí puede tener problemas con cantidades minúsculas.

¿Qué alimentos puede y no puede consumir un alérgico a la leche?

Las personas alérgicas a la leche pueden consumir únicamente alimentos que no contengan leche ni derivados lácteos entre sus ingredientes. Es importante verificar que en la lista de ingredientes de la etiqueta del alimento no aparezca la palabra "leche". 

Leche y derivados lácteos: yogures, quesos, mantequilla, helados a base de leche, batidos... No te confíes, un alérgico no puede consumir productos lácteos aunque en la etiqueta indique "sin lactosa".

Alimentos que contengan leche o derivados como ingredientes: embutidos y otros productos cárnicos, puré de patata, salsas, cremas, zumos y otras bebidas, cereales de desayuno, bollería...

Ser intolerante a la lactosa ¿qué es?

La intolerancia a la lactosa se produce por el déficit de la enzima digestiva llamada lactasa y lo que dificulta es la digestión de los alimentos que contengan lactosa (un hidrato de carbono presente en la leche y otros lácteos) y produce molestias gástricas, gases y diarrea.

Las intolerancias pueden desarrollarse en cualquier momento de nuestra vida y nunca suelen ser mortales.