RIESGO INCENDIOS
El robo de cableado, un proceso peligroso para el medio natural por la propagación de incendios
Las quemas que realizan para sacar el metal llegaron a provocar un conato de incendio en Jadraque
La Guardia Civil ha intensificado la vigilancia en zonas rurales de la provincia de Guadalajara ante el aumento de casos de robo de cobre. Estos hechos no solo producen daños por los hurtos, sino también por las quemas que realizan para sacar el metal, que llegaron a provocar un conato de incendio en Jadraque.
Zonas de quema y almacenaje de cobre en espacios naturales que ha obligado a la Benemérita a intensificar sus labores de vigilancia. Los autores de estos hechos delictivos buscan lugares aislados y escondidos, el lugar perfecto para la quema de los cables para obtener el cobre una vez separado del plástico. Y el momento perfecto para hacerlo, la noche.
Para que el humo no les delate el fuego que están haciendo. Al quemar el cable, como tiene residuos plásticos, genera una densa cortina de humo", Carlos Calderón, Capitán de la Guardia Civil de Jadraque.
Este proceso para la obtención del cobre es potencialmente peligroso para el medio natural, sobre todo en época de verano.
Situaciones donde la vigilancia en necesaria, así como la colaboración ciudadana. "Son los que están en el terreno y se percatan o bien de los puntos donde han cortado cable o bien de los puntos de quema", comenta el Capitán.
Último robo de cable en Ciudad Real
Dos personas han sido detenidas, una de ellas con numerosos antecedentes policiales, por la sustracción de cable del tendido telefónico. Se trata del último robo de cableado conocido hasta la fecha.
Los autores fueron sorprendidos por un agente medioambiental mientras quemaban cobre en un paraje aislado, cercano a la A-2 en el término municipal de Trijueque. Estos se dieron a la fuga y tiempo después, el vehículo sospechoso fue localizado en la zona de la quema de cable, lugar donde detuvieron a los presuntos autores tras una persecución policial que terminó en un accidente de circulación.
Esta operación culminó con la detención de dos personas, una mujer de 24 años de edad y un varón de 30 años, este último con numerosos antecedentes policiales y con tres requisitorias en vigor de distintos juzgados, una de ellas en la que decretaba su detención e ingreso en prisión.
También se ha recuperado una tonelada de cable de cobre procedente del tendido telefónico.