Manifestación de los vecinos de Escalona contra los okupas
Unos 200 vecinos de la urbanización de Carrasquilla-Conejeros en Escalona, Toledo, han salido a la calle para manifestarse contra los okupas que irrumpen en las propiedades de la zona. Salen desde hace ya tres sábados, y por ello hoy han cortado la nacional 304 para reclamar leyes y medidas de seguridad que pongan fin a estos actos y evitar que siga ocurriendo.
Se trata de ocupaciones diferentes a las habituales, son llamadas, según los vecinos "ocupaciones de fin de semana". Una forma de actuación muy parecida a las de otros casos, pero sin quedarse en las viviendas. Entran en las casas, sacan los objetos de los propietarios que en ocasiones los tiran a la basura y finalmente los reemplazan por los suyos. Tras pasar varios días en las viviendas, dejándolas en ocasiones en mal estado, deciden abandonarlas.
Son casas de segunda residencia, la mayoría vacías y escogidas por los okupas para residir en ellas, dejando a los propietarios sin su hogar. El miedo de muchos de los vecinos es a volver un día y encontrarse la casa ocupada. Por ello, la mayoría han puesto alarmas, aunque saben que no es un buen método de impedimento. Para ello las manifestaciones y sus peticiones más allá de la seguridad.
Por el momento han entrado en dos chalets de la urbanización, pero los vecinos no quieren que se repita lo que ocurre, en otras urbanizaciones de la localidad donde se llega, según ellos, a los 100 chalets ocupados, destrozados o en los que han entrado a robar.
Están cansados del ruido que generan, los desperfectos, los destrozos de los okupas o el poco respeto que muestran por los vecinos. Además se quejan de que enganchen el agua y la luz, un bien común y privado pagado por la comunidad.