ENTREVISTA
La lluvia da un respiro a la sequía en el campo, ante la llegada de olas de calor extremo en verano
La lluvia que ha dejado las tormentas de las últimas semanas habría corregido relativamente el déficit hídrico ocasionado por la sequía en Castilla-La Mancha.
Las lluvias caídas por las tormentas que se han registrado en gran parte de la región durante las últimas semanas habrían sido "muy positivas y beneficiosas" para corregir ligeramente el déficit hídrico causado por los meses de sequía en Castilla-La Mancha.
Así lo ha valorado en Radio Castilla-La Mancha, Marcelino Rojo, el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología en Castilla-La Mancha, quien ha explicado que estas lluvias "han corregido algo" este déficit hídrico.
Aunque se trata de lluvias que están muy poco extendidas, el balance "es positivo", porque "han ayudado a que el suelo esté más húmedo". En general, "han sido unas lluvias muy beneficiosas" para algunos cultivos como los almendros, ha asegurado. También se han visto beneficiados los viñedos de secano, como estos de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real).
Este tipo de precipitaciones no suelen estar bien distribuidas, "porque hay sitios en los que llueve mucho y otros en los que no cae nada". Son lluvias que corrigen relativamente y "en las zonas en las que caen pueden, incluso, hacer daño", especialmente a los cultivos.
Temperaturas récord
En cuanto a las temperaturas, el experto ha explicado que "es esperable que este verano tengamos olas de calor tan prolongadas como las que vivimos el verano pasado", porque el calentamiento global es una realidad, que ya estamos viviendo.
A partir de ahora, y desde hace años, las olas de calor serán cada vez más tempranas e intensas, lo cual no quiere decir que no pueda haber periodos intercalados más fríos, algo que también "va a pasar". Esto explicaría la intercalación de veranos de calor extrema con episodios de fenómenos meteorológicos adversos de frío ocasionales, como fue la borrasca Filomena.
Cada año se batirán récords de temperaturas máximas. De hecho, incluso en invierno, hemos podido comprobar este aumento de temperaturas, cuando se producen los llamados "veranillos" o situaciones irascibles, como ya sucedió durante las pasadas navidades.