Llorente, diputado de Podemos, achaca el mal resultado electoral a errores del "molinismo"
El diputado regional de Podemos David Llorente ha achacado los malos resultados electorales de la formación al "molinismo" implantado por su exlíder José García Molina, al error de entrar en el Gobierno de Castilla-La Mancha y a los "despropósitos" de la campaña electoral.
En un artículo de opinión que ha remitido a los medios bajo el título de "Humo y tierra quemada: "el 'molinismo' hunde Podemos Castilla-La Mancha', Llorente ha reprochado a García Molina que haya presentado su dimisión, junto a todo su Consejo de Coordinación, sino que haya admitido "cualquier relación entre estos resultados y el cogobierno en minoría con el PSOE de García-Page o la propia campaña electoral".
Llorente considera un "error" haber entrado en el Gobierno
Llorente ha afirmado que la entrada de la formación morada en el Gobierno regional "se decidió mediante una consulta-trampa que vinculaba esa entrada a la aprobación de los presupuestos regionales, privando deliberadamente a los inscritos e inscritas de Podemos de la posibilidad de optar por la aprobación de unos presupuestos con avances sin necesidad de entrar en el Gobierno de García-Page".
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A su juicio, esta opción "probablemente habría sido mayoritaria de haberse contemplado", aunque ha considerado que "en cualquier caso, y con independencia de cómo se hizo aquella consulta, el cogobierno en minoría con el PSOE de García-Page ha resultado un evidente fracaso y se ha demostrado innecesario, inútil y, sobre todo, contraproducente".
Campaña electoral con "un cúmulo de despropósitos"
A esta circunstancia se ha unido "una campaña electoral que ha sido un verdadero cúmulo de despropósitos", ha afirmado Llorente, que ha situado "el más sonado" el de la propuesta de plantear el empadronamiento en Castilla-La Mancha como criterio de priorización para el acceso al empleo público.
Esta propuesta "implica asumir el marco discursivo de la derecha de la disputa por la escasez entre la gente de abajo y del 'los de aquí primero', en lugar del discurso de la izquierda sobre la igualdad de derechos y el reparto de la riqueza frente a la minoría privilegiada", ha apuntado.
Asimismo, ha señalado que "esta ocurrencia de José García Molina, que no pasó por el Consejo Ciudadano Autonómico de Podemos ni fue tampoco acordada con los socios de la coalición electoral, provocó el desmarque público de Izquierda Unida y el rechazo unánime de todos los sindicatos representativos de la Función Pública".
Los sindicatos "la tacharon, con razón, de xenófoba e inconstitucional", ha opinado Llorente, quien piensa que "concitar en tu contra la difícil unidad sindical en plena campaña electoral es, a todas luces, un error monumental".
Pero ha comentado que "difícilmente puede realizarse una campaña creíble y sólida cuando durante toda una legislatura no solo se ha seguido una trayectoria política errática y con fuertes bandazos, sino que además se ha llevado a cabo un desmantelamiento metódico y completo de toda la organización" con la gestión de García Molina como secretario general de Podemos Castilla-La Mancha.
"Política sistemática de exclusión y acoso"
Según Llorente: "Bajo su dirección se ha practicado una política sistemática de exclusión y acoso contra cualquier persona que no se plegase a un seguidismo ciego y acrítico del 'molinismo', una política sectaria que ha atravesado todos los niveles y ámbitos de la organización, desde el Consejo Ciudadano Autonómico a los círculos, pasando por el Grupo Parlamentario y las redes sociales oficiales del partido, consagradas al culto al líder".
"Al final, sobraba tanta gente que el partido quedó reducido a poco más que una camarilla de afines en torno al secretario general", ha aseverado el parlamentario de Podemos.
En este contexto, ha apuntado que "uno de los capítulos más bochornosos ha sido la campaña de difamación dirigida contra mi persona a través de liberados de esa camarilla que me acusaron falsamente y sin pruebas de trato sexista y discriminatorio", lo que permitió a García Molina "desautorizarme públicamente como portavoz parlamentario".
Llorente ha subrayado que "no se trató en absoluto de un hecho aislado" porque "la lista de malas prácticas del 'molinismo' es francamente extensa".
Además, ha reflexionado que "asumir responsabilidades no consiste solamente en dimitir de cargos, sino también y sobre todo en admitir errores y rendir cuentas de una gestión", algo que no ha hecho García Molina, que "simplemente ha huido en su moto dejando tras de sí un rastro de nada más que humo y tierra quemada", ha lamentado.