La Guardia civil investiga si el sellado del pozo de Nambroca (Toledo) se ajusta a la normativa vigente
La Guardia Civil ha iniciado una investigación para ver si el sellado del pozo de Nambroca al que cayeron dos menores este fin de semana se ajusta a la normativa vigente. Se trata de determinar posibles responsabilidades en el suceso.
Los menores cayeron unos ocho metros de profundidad, dentro de un pozo situado en una finca de la localidad de Nambroca, en Toledo. Los dos chavales permanecieron unas tres horas en el interior del pozo. Primero, agarrados a unos tubos y ladrillos y luego, a unos flotadores que les tiró Protección Civil. Eso les salvó la vida hasta que llegaron los bomberos.
Al parecer, el pozo estaba bien sellado, pero cedió. Ahora la investigación tendrá que esclarecer si fue un accidente o si alguien puede tener algún tipo de responsabilidad.
Los menores, de 15 años, fueron trasladados al centro hospitalario poco antes de la medianoche, una vez que fueron rescatados por los bomberos del Consorcio de Toledo. El pozo se encuentra en una casa abandonada situada en las cercanías del campo de fútbol de Nambroca.
En una primera inspección ocular los agentes determinaron que el sellado estaba hecho en una mitad con rasillones y en la otra, con una placa metálica con candado.
En esta ocasión, el rescate ha tenido un final feliz. No ocurrió así cuando en enero de 2019 se sacó el cuerpo sin vida del pequeño Julen de este pozo ilegal de Totalán (Málaga). El propietario de la finca fue condenado a un año de cárcel y a pagar 180000 mil euros a los padres del pequeño.