Umbralejo vuelve a la vida con ayuda de jóvenes de la región y otras partes del mundo

Umbralejo es un pueblo de la Sierra Norte de Guadalajara. Un enclave idílico en el que no hay vecinos desde hace más de medio siglo, desde 1972. Por ello, se ha convertido en uno los enclaves donde el Gobierno de Castilla-La Mancha está interviniendo para luchar contra la despoblación y el olvido. 

A través de dos campos de voluntariado de la mano del programa 'Verano Joven' del Gobierno regional van a recuperar el patrimonio arquitectónico y medioambiental de este lugar. 

32 jóvenes de diferentes partes del mundo están organizados en torno a dos campos de trabajo: uno entre el 1 y el 15 de agosto, al que acudieron jóvenes de origen español; y otro que está teniendo lugar actualmente, concretamente entre el 17 y el 31 de agosto, y en el que concurren jóvenes de origen internacional.

Dentro de este grupo, hay voluntarios llegados de Colombia e incluso de Kazajistán. Se afanan estos días en el mantenimiento de las instalaciones, la recuperación de elementos como las viejas carboneras o la reconstrucción de algunos desperfectos.

Este campo de voluntariado internacional tiene integrantes de varios continentes, comprometidos y en medio de un ambiente de gran camaradería.

Hace 40 años que comenzó a andar este ambicioso proyecto en el que Estado y Junta de Comunidades siguen empeñados en mantener viva la memoria de Umbralejo.

En 1984 tuvo lugar el inicio del Programa de Recuperación de Pueblos Abandonados, promovido por la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha y los Ministerios de Educación, Cultura, Deporte, Medio Ambiente y Fomento. 

Fuera del territorio de la Comunidad Autónoma se ofertan campos de voluntariado, no solo en España, sino en destinos situados en países de Europa, Asia, África, América del Sur y Oriente Medio.