CIUDAD REAL

Las Tablas de Daimiel vuelven a inundarse con pozos de emergencia

La medida permitirá garantizar la invernada de las aves acuáticas y prevenir incendios por autocombustión de las turbas en el humedal

El Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, considerado a nivel internacional como uno de los humedales más importantes de España, ha alcanzado las 623 hectáreas inundadas.

El Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel alcanzó las 623 hectáreas inundadas la pasada primavera.EFE

redacción cmm
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La activación de la batería de pozos de emergencia del parque nacional de Las Tablas de Daimiel, en Ciudad Real, ha comenzado ya a inundar la laguna permanente y otras zonas próximas, que llevaban secas desde hacía meses. De hecho, el humedal apenas tenía 62 hectáreas inundadas cuando se solicitó esta actuación de urgencia.

El aporte de agua desde estos pozos, solicitado hace un mes por la comisión mixta de gestión de los parques nacionales de Castilla-La Mancha a la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), permitirá garantizar la invernada de las aves acuáticas y prevenir la posibilidad de que se produzcan incendios por autocombustión de las turbas en el humedal.

Como máximo está permitido extraer de estos pozos de sequía para el parque 10 hectómetros cúbicos al año, más 2 hectómetros cúbicos adicionales de las concesiones propias con las que cuenta el parque.

Esta medida, que se contempla desde 2020, también se puso en marcha en diciembre del año pasado con muy buenos resultados, recuerdan desde la Junta. Gracias a ella y las lluvias registrados se alcanzaron más de 600 hectáreas inundadas en primavera, generando una relevante repercusión en la biodiversidad de Las Tablas.

El trasvase, denegado

Además de la activación de los pozos de emergencia, el Patronato del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel planteó a mediados de diciembre un trasvase de 20 hectómetros cúbicos de agua desde el Tajo al humedal, pero la negativa de las organizaciones ecologistas y la abstención del la Confederacion Hidrográfica frenaron esta actuación.

El humedal manchego arrastra desde hace décadas graves problemas de sequía por la sobreexplotación agrícola que ha mermado el aporte natural de agua que tradicionalmente recibía del Acuífero 23. Este almacén de agua subterránea ya fue declarado sobreexplotado de forma provisional en 1987 y de forma definitiva en 1994. Los derechos de extracción para riego en la agricultura superan desde hace años la capacidad de regeneración del acuífero.

Según el Plan Rector del Parque Nacional, las Tablas de Daimiel deberían tener 1.400 hectáreas inundadas a comienzos de primavera como mínimo y 600 hectáreas a finales de verano.

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