Castilla-La Mancha bate su récord de población de lince ibérico y de nacimientos de cachorros
Castilla-La Mancha cuenta con una población de 473 linces ibéricos en su territorio, 146 ejemplares más que los que había en el anterior censo elaborado en 2020, que suponen en 35 % de individuos de esta especie en peligro de extinción que hay en la península ibérica.
Del total de linces que hay en Castilla-La Mancha, 221 ejemplares habitan en los Montes de Toledo, 170 en Sierra Morena Oriental y 82 en Sierra Morena Occidental, de acuerdo con los datos del informe anual sobre la población estimada de lince en España que han sido dados a conocer este viernes, ha informado en una nota de prensa la Consejería de Desarrollo Sostenible.
El titular del departamento, José Luis Escudero, ha valorado la cifra de linces que están asentados en Castilla-La Mancha, y ha destacado que "se ha batido de nuevo nuestro propio récord", al haber aumentado 146 ejemplares con respecto a los 327 que había en el censo de 2020, así como el hecho de que "en nuestra región ya habitan el 35 por ciento de los linces de toda la península ibérica a día de hoy".
Al respecto, Desarrollo Sostenible ha apuntado que en el informe anual sobre la población estimada de lince en España se han identificado un total de 1.365 ejemplares a finales de 2021 asentados en Andalucía (519 linces), Castilla-La Mancha (473) y Extremadura (164), mientras que en Portugal hay 209.
La Consejería ha subrayado que Castilla-La Mancha es también la comunidad autónoma española que más ha incrementado su población de linces en comparación al censo de 2020, que reflejaba que en la Península había en ese momento un total de 1.111 ejemplares repartidos entre Andalucía (506), Castilla-La Mancha (327), Extremadura (141) y Portugal (140).
Escudero ha calificado estos datos como "muy positivos", ya que "reflejan la importancia de esta región para la conservación de la especie en peligro de extinción, ya que somos la segunda comunidad autónoma en población de este felino, muy próximos a Andalucía".
Asimismo, ha valorado que se consolidan los tres núcleos de población estable que aporta Castilla-La Mancha a los 13 identificados, doce de ellos en España (cinco en Andalucía, tres en Castilla-La Mancha, y cuatro en Extremadura) y uno en Portugal, que según el consejero "confirma que el arduo trabajo que estamos llevando a cabo en materia de reintroducción y conservación de especies en peligro de extinción" desde el Gobierno regional.
La Comunidad donde más cachorros de lince ibérico nacieron en 2021
El consejero ha considerado que es "muy significativo y reseñable" que Castilla-La Mancha haya sido la comunidad que ha aportado más cachorros al censo actualizado, al haber contabilizado el nacimiento en libertad de 208 ejemplares durante 2021 en las tres zonas de reintroducción".
En este sentido, ha explicado que las hembras reproductoras de los tres núcleos poblacionales castellanomanchegos son las que más cachorros tienen de media en el censo, 2,4 cachorros por cada hembra territorial, la más alta en los territorios ocupados por el lince ibérico.
El estudio señala que, del total de los 473 ejemplares de lince ibérico censados durante la temporada de 2021 en Castilla-La Mancha, la zona de reintroducción de Montes de Toledo presenta un censo total de 221 ejemplares en 2021, de los que 117 son adultos, y de éstos 42 son hembras reproductoras, mientras que hay 104 cachorros registrados.
A su vez, la zona de reintroducción de Sierra Morena Oriental (Ciudad Real) acoge 170 ejemplares, de los que 104 son adultos, entre ellos 30 hembras reproductoras, con una producción de 66 cachorros durante 2021.
Y en el núcleo poblacional de Sierra Morena Occidental (Ciudad Real) hay 82 linces censados, de los cuales 44 son adultos -con 16 hembras reproductoras- y 38 cachorros nacidos en libertad.
Un proyecto novedoso permite ver la cría conjunta de madre e hija en la Finca Peñalajo
Por otra parte, Escudero se ha referido a un proyecto novedoso que están llevando a cabo en la finca Peñalajo (Ciudad Real), de la mano de la empresa Wildwatching Spain con la colaboración de los propietarios de la finca y de la organización ecologista WWF.
Se trata de un proyecto pionero de observación de la naturaleza que ha permitido, a través de cámaras remotas, observar un fenómeno "un tanto excepcional", como es que madre e hija, en ese caso Odrina y Queen, hayan decidido compartir una edificación abandonada y criar de manera conjunta a sus seis cachorros, ha señalado Escudero.
EFE